Tan pronto como Mike entendió lo que estaba tratando de decir, se sorprendió. Michael siempre ha tenido curiosidad por el sexo anal. Aún no. Alguna vez ha tenido relaciones sexuales, alguna vez había estado dispuesto a probarlo con él. Ahora aquí estaba su hermanastra, ofreciendo voluntariamente su deseo más profundo en una bandeja de oro.

“ ¿Le dijiste a alguien sobre eso? ” Mike pregunta

“ ¿por qué se lo diré a alguien? No se lo dije a ninguna persona, solo me lo guardé para mí, esperando que algún día, te deje hacerlo conmigo y satisfacerte. Sé que es difícil para una chica dejar que le follen el culo, pero siempre quise ofrecerte el mío para tu satisfacción.

"Entonces dime, ¿cuántas chicas has follado por el culo?" Jennifer preguntó.

"Ninguna chica me ha permitido. Siempre tienen miedo de que sea doloroso por lo enorme que soy." Mike respondió.

“ No los culpo. Eres realmente enorme." Jennifer dijo, y movió su mano hacia su entrepierna y agarró su polla hinchada. Comenzó a ponerse