Ha pasado ya casi un mes, mi boda es en tan solo en una semana, las cosas entre Harry y yo van fantásticas.

Desde que decidí ya no guardar rencor y perdonar, lo veo como lo que es, un caballero, un hombre que me ama sin medidas, y aunque no pueda complacerme en solo una cosa, hace lo imposible por complacerme en muchas otras. Nos entendemos a la perfección, me ha dejado trabajar desde casa, él mismo me hizo una oficina con la tecnología correspondiente y así poder hacer juntas con las distintas sucursales que tiene la empresa alrededor del mundo, juro que me enamoré mucho más de él, a veces pienso que fui una tonta al decir que lo odiaba tanto tiempo.

Dejé los juegos sexuales, las salidas privadas y a escondidas, Harry me lo da todo, él es mi nueva perversión, y no tiene miedo de ser mi juguete, lo ama, lo disfruta y lo pide, no me falta nada. Desde la última vez que intent&eacut