-Muy bien mi niña escúchame - me dio indicaciones de a quien buscar para que me ayude pero no sé si debo confiar creo que sería una buena opción para un nuevo comienzo-… amor cuando lo encuentres hazle caso en todo y pierde contacto con todos… hasta con migo- creo que ella habla en serio con lo de ayudarme-… suerte en tu nueva vida amor-

No puedo creer que ella me ayude aun sabiendo que si el alfa lo sabe… no sé qué haga con ella. Me fui a dormir… en la mañana me arregle y me dispuse a buscar al hombre que Nélida me dijo que buscara. Revise la dirección y llegue a una casa muy bonita, estaba nerviosa pero me dispuse a tocar… me sorprendió pues una joven blanca de cabello castaño y crespo abrió la puesta con una sonrisa, se veía mayor que yo, así que me dispuse a hablar.

-Hola-

-Hola, ¿buscabas a alguien?-

Me sentí incomoda no sabía si era el lugar correcto

-¿Aquí vive el señor Ricardo?-

-O si, pasa- entre y la casa tenía un aire acogedor y familiar-… siéntate, voy a buscarlo- por un momento me sentí nerviosa, no sabía con qué clase de hombre me toparía hasta que lo vi mis nervios aumentaron hasta que dijo.

-Hola, dime en que puedo ayudarte-

-Hola, mi nombre es Ana… Nélida dijo que usted podía ayudarme- el hombre cambio su semblante al escuchar ese nombre, se portó más amable- bueno Ana hablemos con más comodidad porque no nos acompañas a desayunar- ¡Dios!, no me di cuenta de la hora aún era muy temprano…. Pero que tota soy, estaba tan nerviosa que no me fije en la hora

-yo no quería incomodar… no me di cuenta de la hora, yo podría venir después- me disponía a irme cuando una señora salió de lo que supongo es la cocina-

-No mi niña, mi esposo ya te invito así que te quedas- me disponía a negarme cuando ella me interrumpió-… no es ninguna molestia así que ven y siéntate… por cierto soy Ángela y ella es nuestra hija Melissa- presento a la chica que me abrió la puerta-

-Es un placer soy Ana- es incómodo ver esa familia tan unida cuando la mía me había sacado de su vida como un objeto.

-Dime Ana en que puedo ayudarte- lo mire dudosa, no savia si debía hablar frente a su familia-… tranquila Ana puedes hablar, confía en nosotros-

-Bueno lo que yo necesito es un nuevo comienzo, donde nadie me pueda encontrar- hable claro y fuerte con más seguridad de la que creí que tenia

-Está bien Ana y ¿sabes que nombre y apellido tendrás? ¿Cómo quieres que sea tu nueva vida?- bueno eso no me lo esperaba parece que hace eso mu seguido

-Bueno me gusta mi nombre así que deseo conservarlo, pero en el apellido no he pensado ¿Qué apellido me recomienda usar?-

-Cualquiera estará bien, dime Ana ¿vivirás sola?-

-Si-

-¿Tienes dinero para vivir sola?-

-Si-

-Entonces iniciaremos los trámites cuanto antes-

-Gracias, me parece bien- luego de desayunar, me despedí de ellos son una familia muy unida me alegra de que no hayan hecho más preguntas de las necesarias.

Ya en mi departamento solo me queda esperar a que el señor Ricardo realice los tramites con mi nueva identidad, mientras tanto deseché todo lo que me pueda conectar con mi pasado… compre un nuevo móvil, el cual observe que en los números de contactos solo estaba registrado mi nuevo número, sentí melancolía al recordar que ya no tendrá contacto con ninguno de mis amigos, pero todo esto es necesario para iniciar mi nueva vida.

Dos días después fui a reunirme con el señor Ricardo el cual ya tendría todos mis documentos en orden.

-Hola, Melissa ¿cierto?- ella sonríe ¡ja! No tengo tan mala memoria

- pasa Ana- ¡ohm! ella tampoco

-¿está tu papa?-

-sí, siéntate en seguida baja-

…….

-Hola Ana. Aquí están todos los documentos que necesitaras para iniciar tu nueva vida, espero no te incomode que haya hecho algunos cambios… veras, es extraño que aparezca una chica en los registros sin familia, así que tuve que inscribirte como mi hija… así que esas registrada como “Ana Williams”, tu podrás seguir con tu vida  como si nada lo único que ante la sociedad eres mi hija-

Bueno eso no me lo esperaba, vine a este país huyendo de mi familia y ahora resulta que encontré otra… aunque esta parece una familia normal, y de no ser así no me importa de ahora en adelante no pienso esperar mucho de las personas.

-Bueno señor Ricardo por mí no hay problema… espero que su familia este de acuerdo con esto-

-Claro Ana, ellas están de acuerdo, Melissa está muy feliz con la idea de tener una hermana- espera ¿QUÉ?... HERMANA… ¡no! yo no quiero una familia-

-Señor Ricardo, agradezco su amabilidad y todo lo que hace por mí pero… yo vine aquí para alejarme de todo incluyendo a mi familia así que no creo conveniente que viva con ustedes como miembro de su familia- valla dije eso muy seria y firme, más de lo que quise sonar

-Ana… entiendo eso y me disculpo por no tomar en cuenta tus sentimientos… pero sin embargo tú deberás vivir con nosotros por un tiempo, hasta que podamos presentarte como nuestra hija y así tú y nosotros no tengamos problemas…. Espero entiendas- creo que no sería tan malo además si de eso depende que pueda tener una nueva vida lejos de mi pasado, no estará mal pasar un tiempo con ellos, además parecen buenas personas.

-Esa bien Don Ricardo… Si es necesario lo are, pero quiero que sepa que yo no quiero ser una molestia para ustedes,  en cuanto esté todo listo me iré-

-Ana no es una molestia, ahora ve a recoger tus cosas queremos que te mudes cuanto antes- solo asentí y cuando salí no estaba la señora Ángela ni Melissa así que fui directo al departamento a empacar todo.

Mi equipaje seguía constando de una maleta ahora un poco más grande que la anterior ya que me deshice de todo y lo que ahora llevaba con migo es lo que había comprado hace unos días para mi nueva vida… a con todo listo, le entregue las llaves del departamento a la casera, y me puse en marcha a la que será mi nueva casa… definitivamente esto no estaba en mis planes,

-¿Qué me deparara el futuro?- hice la pregunta al vacío.