Una vez más, fue otra reunión cálida y encantadora con la familia de Taylor, que le recordó a Charly su propio hogar.

***

Unas horas después, Charly seguía en las nubes por su cita con Taylor. No podía dejar de pensar en ese momento.

Ya estaba en la cama, preparándose para dormir, pero su corazón seguía inquieto. Se incorporó de golpe, frunciendo el ceño. Sabía exactamente lo que necesitaba: una pastilla para dormir llamada Taylor Vega.

Charly y Taylor habían acordado que no compartirían la misma cama en este viaje, principalmente porque ella estaba preocupada por lo que pensarían sus padres. Sin embargo, su corazón lo anhelaba tanto que decidió escabullirse en medio de la noche.

Tocó varias veces la puerta de Taylor antes de que finalmente la abriera.

—¿Charly? —se sorprendió Taylor.

'Mierda', tragó saliva. No ayudaba nada que Taylor solo llevara puestos sus calzones. Él y toda su gloria estaban ahí para que sus ojos se deleitaran.

—¿Charly? —le preguntó Taylor otra vez, con esa sonri