El rostro de Taylor se mantuvo serio. Estaba sentado junto a Charly con el brazo rodeándole la cintura.
Razonó con el policía. —Maltrató a mi hermano y golpeó a mi novia. Yo digo que se merecía cada golpe, oficial. Me gustaría hacer una llamada telefónica, por favor.
Después de que Taylor hiciera la llamada, llegaron los padres de Víctor y Kevin, seguidos por la familia Vega. Charly se puso ansiosa, temiendo que la policía ya hubiera contactado a su contacto de emergencia: su mamá. Si Riley se enteraba de que Charly había estado involucrada en una pelea, ¡su padre sin duda correría a Luxford inmediatamente!
Sin embargo, para su sorpresa, alrededor de las diez de la noche, el oficial de policía regresó a la sala de detención y anunció. —Pueden irse todos. No se presentarán cargos contra ustedes y nada quedará en sus expedientes.
—Y señorita Reyes, tal como lo solicitó la familia de Taylor, a sus padres no se les informó del incidente de hoy. —Agregó el oficial.
Todos en su grupo se sin