MISAEL JHOMSON

Mi mano queda inmóvil en su lugar al verla, su mirada no se despega del auto, la veo caminar hacia nosotros con cautela, pero puedo percibir una pequeña sonrisa en el proceso, mi corazón late a mil por hora cuando empieza a acercarse.

Interrogantes invaden mi mente muy rápido que no me dan tiempo de procesar bien lo que está pasando.

¿Por qué no está con él?

¿Qué hizo que cambiará de opinión?

¿Esto en verdad está pasando?

Lo único que pienso ahora es que sea lo que sea, muy en el fondo ella nos reconoce, ella sigue siendo la misma de hace 5 años aunque no nos recuerde.

La veo frente al vidrio del copiloto mirándome, da pequeños golpes con sus nudillos que me sacan de mis pensamientos, sin esperar presiono uno de los botones en mi puerta que quita los seguros de todas las puertas, ella abre y entra muy rápido, su respiració