DETRÁS DEL ANTIFAZES

DESEO CUMPLIDO:

EL AMANECER:

Había dormido plácidamente, como en muchos años no lo hacía. Tal vez; era el cansancio post sexo lo que lo había ayudado. No había abierto los ojos aún, la mujer con quien había compartido su cama toda la noche. Era algo muy extraño para ser humana.Sonrió cuando recordó que una de las tantas veces que ella la hizo correr, le mordió el pecho. No era la dulce caperucita. Quería volver a hundirse en ella; al recordar lo bien que se sentía, cuando la muy descarada se apretaba alrededor de su ej

TE ENCONTRÉ:

El gran cuerpo musculoso comenzó a temblar de anticipación. Trató de controlar su respiración: era la única manera de aplacar un poco a su lobo. Que estaba amenazando con salir a la superficie. Detrás de aquel olor a fresas silvestres, sus favoritas. Llegó hasta ella, no podía creerlo. Nunca su lobo se había alterado de esa forma por una mujer; como en ese momento. Se alegró cuando se dio cuenta que no era el único afectado. Pudo ver cuando su cuerpo curvilíneo se estremeció. Estaba con muy poca r

EL ANTIFAZ:

Un sentimiento de que algo no estaba bien la invadió de pronto. Sentía que era un total y completo error. No le gustaba celebrar su cumpleaños. Cosas extrañas pasaban ese día por ser Halloween. Aceptó la invitación de Agnes porque quería ser amable. Muy claro le había dicho que no mostraría su rostro. En el teatro encontraron un antifaz que ella pudo reconstruir con algunos materiales que había ahí. Era de color negro lo había reconstruido con tul de color negro, en sus bordes finas perlas de colo

LA ENTREVISTA:

El hombre de cuarenta y cinco años chasqueó los dientes. —No señorita. La verdad es que estoy asombrado de su resumen curricular, el cual es impecable para alguien de su corta edad, y sus referencias son magnificas. Su contrato con nosotros será solo por tres meses, luego el hotel cerrará sus puertas por otros tres meses y lógicamente abrimos de nuevo. Si usted ha sido una buena empleada podríamos llamarla de nuevo.

PIDIENDO UN DESEO:

Alessadro Megalos miró hacia el cielo como lo había hecho desde niño. Estaba harto de la soledad. La longevidad podía ser una maldición también si no tenía con quien compartirla. Para su raza él era la esperanza del cambio, pues había nacido una noche de luna roja.Su madre siempre le decía que cada noche de luna llena hablara con la Madre Luna y le pidiera un deseo con fe. Cerró sus ojos. Esa noche lo haría con toda la fe que podía tener. Antes lo pedía solo por pedirlo, pero ahora era una

ARGUMENTO:

Cuenta la leyenda que su raza apareció por una maldición del mismo Dios del Olimpo, Zeus. Sin embargo; la luna le brindo consuelo y compasión. Desde entonces lo ha acogió como si fuese un hijo. Al ver en aquel hombre el dolor tras su arrepentimiento decidió hacer un pacto de sangre con él. Podría vivir sobre sus dos píes entre los hombres, siempre y cuando respetara la vida humana y los protegiera incluso de ellos mismos. Para que su lado salvaje no lo consumiera una vez al mes cuando la luna estuviese llena su bestia tomaría el control de su cuerpo, pero no de su razón. Para que recordara que no podía dañar a ningún humano. Solo la compañera de vida puede equilibra

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