Nunca había deseado volar más, si volar lejos y empezar una vida lejos de todo el caos pero sabia que era imposible de alguna manera los recuerdos volvían a mi mente y me golpeaban con mucha fuerza. Siempre me derrumbe ante la idea de perder a la gente que amaba, mis abuelos eran mi vida entera por ellos soportaba todo lo que me pasaba , me ayudaban a sobrellevar mi vida de una manera asombrosa, crecí sin el amor de mis padre pero Dios me premio con los dos ancianos que me dieron hasta su último aliento. Crecí bajo múltiples rechazos, mucha maldad mi vida llego a ser un verdadero fiasco pero la vida al pasar el tiempo y en el momento preciso nos podrá al frente todo lo que deseamos alguna vez, pero la realidad es que no se si se el recuerdo del ayer me dejara de perseguir alguna vez...
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