¿Qué escondes Judith ? fue lo primero que me dijo cuando quiso entrar a mi vida. Cuando quiso tomar posesión de todos mis espacios, incluso quiso adueñarse de mi. Así era el. Sebastián Vitale. Un multimillonario de 32 años. Completamente arrogante, engreído. El pensó que yo no valía nada, que venia conjunto a una silla del lugar que había comprado. Era un jodido idiota y todo lo que piensas cuando ves a una persona que jamás le ha faltado nada. Cuando inundo el Club en el cual trabajaba, su presencia, todo se sintió extraño. Todos los días me recordaba a mi misma que debía seguir allí, por mi madre, por sus medicamentos, por una buena vida. Sebastián jamás se hubiera imaginado quien era yo... como yo conocía su mundo. El se adueño de todo e incluso de mi, cuando lo que jamás había querido era que eso pasara. Desde el primer momento fuimos el agua y el aceite y todo se volvió polvo, en segundos.
Leer más