CAPÍTULO 37. Tuve un buen maestro

Sangre, Stefano quería ver sangre correr frente a él mientras empujaban la puerta de aquella clínica. Tres Di Sávallo y un Di Sávallo honorario entraron allí y la muchas de la recepción los miró un poco azorada por el aspecto amenazador que traían.

—Queremos ver a Charlie, ahora —sentenció Stefano y la muchacha negó.

—No podemos darle información de nuestros pacientes por...

—Ella no es una paciente aquí —replicó Kiryan—. Así que más le vale llamarla ahora mismo.

Todos pudieron ver la duda en el rostro de la muchacha, pero finalmente levantó el teléfono y marcó un botón del teléfono.

—¿Sí, Pediatría? Necesito hablar con Charlie, la están buscando unos señores que...

Pero no pudo terminar de hablar cuando un hombre salió del ascensor.

—¡Cuelga ese teléfono! Te he dicho mil veces que no se comunica a nadie extraño con Cha...! —gritó el doctor Karlsson, pero apenas vio a Stefano y a Kiryan se puso lívido como una hoja de papel.

—Buenas, doctor —se adelantó Stefano alargando su mano, pero
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo