Capítulo 2

Capítulo 2

Violeta San Marino

En estos momentos; estamos bailando nuestra canción ante las miradas atentas de todos los presentes y aunque me siento bastante nerviosa. Solo necesito ver los lindos ojos de Erik y ahí sé, que todo está bien. Él no me dejará caer y estará ahí conmigo siempre.

– No puedo creer lo hermosa que eres mi amor, no veo la hora de quitar ese lindo vestido de tu cuerpo. Muero por hacerte mía cuanto antes y hacerte el amor como te mereces – me susurra en el oído y yo me sonrojo completamente.

– Entonces yo debo de admitir que me muero por estar entre tus brazos; amor mío, gracias por respetarme y esperar por mí todo este tiempo. Para ti tuvo que haber sido difícil aguantarte de esa manera; aún más, cuando sé que tú ya tenías experiencia.

– Eso no importa preciosa, yo por ti haría lo que fuera sin importar el precio.

Luego de eso, seguimos bailando unas cuantas canciones más acompañadas de muchas personas. Por lo que ahora me encuentro hablando con algunos invitados que se me han acercado para felicitarme.

– Perdón que me robe a la novia, pero quiero felicitar a mi nuera querida por haber contraído matrimonio con mi hijo – dijo el padre de Erik tomando mi mano. 

– Señor Máximo, usted siempre tan atento y cariñoso conmigo – dije con una sonrisa.

– No querida, nada de señor a partir de ahora. Dime suegro o Máximo desde este preciso momento. Ya somos familia y te he visto crecer desde pequeña, por favor. Tu padre estaría orgulloso de la bella mujer en la que te has convertido.

– Máximo tiene razón, mi niña. Yo también estoy convencida de que tu padre se moriría de la dicha al verte. Estoy tan contenta por ti, sé que al lado de Erik serás muy feliz.

– Gracias; a los dos, por sus hermosas palabras. Son muy importantes para mí.

– ¿Quién diría que te ibas a casar primero que yo? – preguntó Leslie llegando con mi prima y abrazándome en el acto.

– Cualquiera que te conozca porque de las dos; la única que tenía novio fijo, era yo. Tú solo tienes ligues de unos días y así dices querer encontrar a tu príncipe azul.

 – Que aguafiestas eres Violeta. Menos mal que eres mi amiga y no mi enemiga, de lo contrario, no sé que sería de mí –dijo esta y todos empezamos a reírnos por su comentario. 

– ¿Y el novio por donde anda? –pregunta mi prima con una sonrisa.

– Fue un momento a saludar a unos amigos suyos, debe de estar por regresar en cualquier momento.

– Muy bien entonces; bueno, si me disculpan. Yo voy al baño y en un momento estaré aquí con ustedes otra vez.  

Todos asentimos a sus palabras y ella se fue rápidamente. A medida que la fiesta pasaba, me dediqué a saludar y conversar con muchas personas. Las cuales me preguntaban por Erik y yo la verdad; no sabía en donde se había metido, así que me preocupé bastante.  

– ¿Qué pasa Violeta? – pregunta mi mamá al ver mis nervios.

– Mamá, hace rato que no veo a Erik por ningún lado y tengo miedo de que le haya pasado algo malo. 

– Calma querida, mejor vamos a buscarlo. De seguro debe de andar por ahí con sus amigos, ya sabes como son los hombres. 

– Tu mamá tiene razón amiga – dijo Leslie apareciendo – De seguro, tu príncipe azul anda con alguno de sus amigos tomando y festejando que ya está casado. Ya sabes como son los hombres, les gusta hacer ese tipo de cosas.

– Sí, ustedes tienen razón. Más bien ayúdenme a buscarlo solamente. Yo voy a entrar en la mansión para poder cambiarme el vestido y en seguida las alcanzo, me estoy ahogando con esta ropa tan apretada.

– Está bien, no te apures cariño – dijo mamá. 

Salgo del jardín en donde se está realizando la fiesta de mi boda; para ir a quitarme este vestido, el cual me está asfixiando por completo. Es que solamente a mí se me ocurre casarme con un vestido entallado y más; en pleno verano, donde todo sabemos que hace un calor espantoso.

Cuando subo las escaleras y llego a la habitación de Erik; al entrar, sonidos extraños llegan a mis oídos. Era más que evidente que había alguien más ahí; alguien que definitivamente está gozando su estancia.

Con cuidado y sin hacer demasiado ruido; avanzo para ver si algunos de los empleados de la mansión o invitados de la fiesta están teniendo relaciones aquí, ya que claramente esos son gemidos de un hombre y una mujer. Sin embargo, mientras más avanzo mis ojos se van llenando completamente de lágrimas, sin poder evitarlo y es que veo unas prendas de ropa tiradas en el piso. Unas que precisamente conozco muy bien porque pertenecen a Erik y ese vestido; ese vestido, solo lo llevaba hoy una persona.

Cuando por fin estoy delante de la puerta del baño, la abro despacio y no pude contener más mis lágrimas debido a lo que estaba viendo. Justo en este momento; todas mis ilusiones, mi felicidad, mis sueños y mi corazón están desechos en mil pedazos.

Mi marido, el hombre con el que me acabo de casar, el hombre que creí intachable he integro; está teniendo sexo el día de nuestra boda con mi prima ¡Mi prima! ... Y lo peor de todo esto, es que mientras todos nuestros amigos y familia están abajo preguntando por él. Erik la está tomando con fuerza y ella gime al sentirlo completamente dentro de ella. 

– ¡Violeta! 

Exclama Alexia; sorprendida al verme parada justo en el marco de la puerta, mirando toda la escena y es en ese preciso momento. Solo ahí, es cuando Erik Boyer se voltea para mirarme igual de sorprendido que mi adorada prima.

¿Cómo pude ser tan imbécil y no darme cuenta de esto?

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo