Capitulo 4

POV Vlada:

Senti mis ojos picar, de a poco los fui abriendo, la luz del sol molestándome haciendo que los vuelva a cerrar con fuerza. Abri mis ojos acostumbrándome a la luz producida por el sol, mire a mi alrededor al no reconocer mi habitación, dándome cuenta que estaba en un hospital, específicamente en una habitación de hospital. Vi como mi brazo tenia una aguja, que estaba conectada a una bolsa de suero, y unas especies de imanes en mi pecho, conectados a la maquina en donde se veian mis ritmos cardiacos.

La puerta se abrió, dejándome ver a mi hermana la cual al verme corrió hacia mi abrazandome.

-Vlada! Gracias a la Diosa Luna estas viva- susurro con su cabeza en mi cuello.

-Cía... ¿Qué paso? -dije mientras le correspondía su abrazo confundida.

- ¿No te acordas? - pregunto separándose de mi, a lo que yo negué.

- ¿Vlada? Despertaste- Dirigi mi mirada hacia mi papa el cual venia hacia mi besando mi frente y abrazandome con fuerza.

-Papa ¿Qué paso? - Pregunte confundida, el me miro por unos segundos en silencio acariciando mi cabello.

-Lo mejor sera que te recuperes y que descansés, luego te cuento.

-No, ¿qué paso? – Volvi a preguntar separándome de él, solto un suspiro mirándome fijamente.

-Nos estabas siguiendo por el bosque, unos rogues te atacaron y quedaste inconsiente, perdiste demasiada sangre, asi que tu mamá te dio parte de la suya para que te cures mucho más rápido. – Los recuerdos comenzaron a aparecer en mi mente. Inconsientemente lleve una mano a mi hombro y la otra a mi estomago, ya recordando todo. Me pare viéndome en un espejo que había en la habitación, no me habían quedado cicatrices.

- ¿Cuanto tiempo llevo inconsiente? - pregunte mirando a mi papa.

-1 semana

- Y... ¿Mama? ¿Donde esta?

-Mama esta... En un coma. - Respondio Cia con lagrimas en los ojos.

-La puedo...

- ¡Veo que despertaste! Eso es bueno ¿Cómo te sientes? -Dijo un doctor apareciendo por la puerta

-Donde esta mi madre? - Pregunte mirándolo fijamente.

-Ella esta en-

-YA SE QUE ESTA EN COMA, PERO ¡¿DONDE ESTA?!-Grite, necesitaba verla

-Si no te calmas tendré que dormirte- dijo mirándome seriamente.

-Yo- Frunci mis labios- Perdon, es solo que…- Suspire- ¿La puedo ver?

-Te acabas de levantar, primero me gustaría hacerte algunos estudios antes de que veas a tu mamá, pero lo mejor va a ser que descanses un poco, ¿okey?

-Esta bien.

Me dirigi a la camilla acostándome en ella, vi como Cia y el doctor salían de la habitación mientras que papá se quedo unos momentos mirándome, dejo un beso en mi cabeza y los siguio. Espere unos minutos y después apague el monitor que estaba al lado de la camilla, para que cuando me sacara esos cables que estaban en mi pecho la maquina no hiciera ruido. Me saque esos imanes y la aguja con el suero. Me dirigi a la puerta abriéndola un poco, asomando mi cabeza mirando hacia ambos lados, al ver que no había nadie Sali lo mas silenciosamente posible que pude de la habitación. Caminaba por el pasillo en el que me encontraba, asomando mi cabeza por las puertas para ver donde estaba mi mamá, hasta que la encontré, estaba 6 habitaciones mas adelante que la mia.

Entre y ahí estaba, acostada en una camilla con mil cables clavados en sus brazos, agarre una silla y me puse al lado de ella le agarre la mano y la abrase.

-¿Por qué? ¿Como paso?

-Te dio su sangre.

Me di vuelta rápido al reconocer la voz de mi padre. Se acerco a mi y se agacho a mi altura.

-Eres mi hija, te conozco como la palma de mi mano, y se que sos igual de terca que tu mamá, sabía que cuando salieramos de la habitación la buscarias- Dijo sonriéndome, pasando su vista hacia mi mamá- se que es duro, yo ahora estoy pasando lo que ella paso conmigo.

- ¿A que te referis? - Pregunte a lo que él suspiro.

-Yo estuve en coma por 2 años, cuando nosotros eramos mas jóvenes, Celes estuvo conmigo todos los días y nunca perdió la fe en que iba a despertar, cosa que los doctores no creían- Se quedo mirando a mi mamá unos minutos para después verme a mi- Solo espero que ella se levante mucho antes.

No me di cuenta que estaba llorando hasta que las lágrimas llegaron a mi cuello.

-Solo quiero que despierte, nunca tendría que haberlos seguido por el bosque- Dije llorando con más fuerzas, sintiendo los brazos de mi papá rodearme.

-No te culpes Vlada, promete que nunca te vas a culpar por esto. - Yo no podía parar de llorar, a pesar de las palabras de mi papá, sabia que era culpa mía.

Mi papa solo me abrazo con fuerza besando mi frente. A los pocos minutos entro un doctor con dos enfermeras, al verme negaron con la cabeza.

-Vamos Vlada, quiero hacerte los estudios. - Dijo el doctor, asentí con la cabeza secando mis lagrimas, yendo con el doctor, no sin antes darle una ultima mirada a mi mamá.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo