- Julian. - saludo sin animos de conversar con este.

¿Qué significaba todo eso? Julian lo había hecho salir de su casa con la excusa barata de que estaba comiendo con su novia. Y aunque Zack sabía que eso no era cierto, accedió en ir cuando le ofreció alejarse para siempre de Eli si resultaba que mentía.

Sin embargo, no había llegado al lugar donde supuestamente estaban ambos comiendo, ni si quiera había avanzado mucho, cuando este se le presento en frente diciendo que tenía una propuesta para él.

¿De qué trataba todo aquello?

- ¿Qué quieres? ¿Me has hecho salir de casa para una más de tus tonterías? Es obvio que Eli no esta aquí contigo. Así que, tendrás que cumplir con tu palabra y alejarte de ella.

Julian alzó las manos en señal de rendición y sonriente, como si hubiera descubierto un tesoro invaluble o algo que él no sabía.

- Calmate Shlüter. Solo quiero que hagamos un trato. Te conviene.

- ¿Cómo podría convenirme a mío, hacer algún tipo de trato contigo? ¿Qué estas loco? Eli es mi novia y tú, ya ni si quiera eres su amigo.

- Es verdad. Pero te incomoda que este ahí todo el tiempo buscándola.

- Eso ya está resuelto. Dijiste que te alejarías de ella en cuanto llegara y comprobara que no estaba contigo. - sonrió Zack esta vez en forma triunfante.

- Cierto. Pero podemos hacerlo más interesante.

- ¿Más interesante?

- Una carrera. En motocicleta.

Zack lo miró sin comprender de qué estaba hablando.

¿Por qué querría él ser parte de una carrera comnm Julian?

- Si tú ganas, no solo me alejara de Eli, sino que además, me iré del colegio y de Londres mismo. No tendrás que volverme a ver en tu vida.

- ¿Hablas en serio?

- Por supuesto. ¿Por qué te mentiría?

- Lo has hecho desde el momento en el cual me llamaste diciendo que dejarías en paz a Eli si resultaba que no estabas con ella. Desde un principio, no tenías intención de cumplir con tu palabra. ¿O me equivoco?

Julían rió por lo que él dijo. Y alzando su mano derecha a la vez que llevaba la izquierda, en señal de juramento, dijo:

- Juro que esta vez cumpliré con mi palabra si tú ganas esta carrera.

- ¿Y si no? ¿Qué pasa si tú ganas?

- Entonces... tendrás que permitir que Eli y yo seamos amigos. Convencerla de ello, de que vuelva a ser mi amiga.

- Eres un enfermo.

- Cuidado. Que en realidad lo que quiero pedirte es que termines con ella. Pero sé que, eso si que no lo aceptarías.

- Que bien me conoces.

- Entonces, ¿qué dices? Es muy buen trato. Y si eres tan bueno como dices en todo cuanto haces, no tendrás nada que temer.

- Acepto. - dijo Zack en un arranque sin si quiera pensarlo bien - Y juro por Dios que ganaré y no tendremos que volver a verte en nuestra vida.

- Eso lo veremos. - sonrió Julían.

***

Cuando Eli fue a tomar un sorbo de chocolate de su taza, esta se resbalo de sus manos accidentalmente y cayó sobre la mesa derramándose.

- ¡Ahy! Cuidado que esta caliente.

Ambas amigas se apartaron de la mesa un poco a la vez que un mesero se acercaba para ayudarles a limpiar la mesa.

- ¿Eli? - la llamo su amiga.

Y es que la rubia, se había quedado estática de pie frente a la mesa observando el chocolate derramado, totalmente pálida.

- ¿Estás bien? ¿Te has quemado? - le pregunto esta preocupada.

Pero ella negó con la cabeza.

- Estoy bien. - dijo llevando una mano a su pecho e inhalando profundamente - Es solo la impresión.

Su amiga la miro extrañada.

¿Por qué le había impresionado tanto que se derramara el chocolate? Eso era algo que a cualquiera podía ocurrirle.

Lo que ella no sabía era que, Eli, había sentido una mal presentimiento de repente.

No sabía a que se debía exactamente pero, era como si su corazón, quisiera avisarle que algo estaba mal.

- Necesito volver a casa, ahora mismo. - dijo.

- Pero,si no hemos terminado de comer.

- Ya se me quito el hambre. De verdad, debo volver. - dijo - Si tú quieres quedate. Nos vemos otro día.

- Pero Eli... - comenzó a decir.

Sin embargo, ella no la escuchó.

Tomó sus cosas y salió de allí rápidamente.

No sabía a que se debía todo eso que había presentido pero, le había causado un terrible miedo del cual aun no lograba recuperarse del todo.

Ella no era el tipo de chicas que sufriera de eso pero, tampoco se podía decir que las personas a su alrededor que más amaba, hubieran sufrido algún tipo de daño o algo por el estilo.

Debía de llegar a casa pronto y ver como estaban su mamá y su hermano.

Zack, sabía que estaba perfectamente en casa durmiendo puesto que, él no había querido salir para nada esa noche, ni con ella ni con sus amigos. Así que, por él no tenía de que preocuparse.

Apresuró el paso, para poder llegar cuanto antes y asegurarse que todo estaba bien.

***

Las carreras a toda velocidad, eran algo que estaba penado por la ley, así que, para competir con Julían, ambos tuvieron que ir a un lugar apartado y solitario.

El error de Zack, había sido el no comprobar el estado de la motocicleta que le dieron. Y eso lo supo en el momento justo en el cual intento frenar pero no funciono.

Los frenos estaban dañados y a la velocidad que iba, sin ningún tipo de frenos, no tendría salvación alguna.

Ese desgraciado de Julian, había hecho todo aquello para deshacerse de él. Y él, había sido tan ingenuo que, no lo había creído capaz de algo semejante. Porque, aunque lo odiara, Zack jamás habría ideado la manera de desaparecerlo llevándolo al borde de la muerte.

Sintió tanta rabia e indignación. Y al mismo tiempo tanto miedo.

Como cualquier persona en el mundo, Zackk no quería morir pero, no veía manera alguuna de que no terminará matándose.

Eso sí, sii por algún milagro divino sobrevivía, juraba por Dios que, haría hasta lo imposible porque ese cobarde y tramposo de Julían pagara por lo que le estaba haciendo.

Por otro lado, Julían, desvió su motocicleta y se largo de aquel lugar cuanto antes.

No necesitaba quedarse para ver el resultado de sus planes. Ahora, solo le quedaba a esperar que, sucediera lo inevitable y la noticia llegara a todas parte.

En un principio, Eli estaría mal, muy triste incluso y puede que hasta llorarra a mares por su noviecito. Pero, una vez que superara su perdida, entonces estaría lista para rehacer su vida. YY ahí estaría él para eso miismo, para ayudarla a rehhacer suu vida y ser el próximo hombre que tuviera el honor de acompañarla siempre.

Detuvo su mootocicletta y dirigió la mirada enn la dirección en la cual se suponía iba Zack, porque a esas alturas, ya no se le podía visualizar ni en la distancia.

Rió dentro de sí e hizo un ademán de adios con las manos.

- Hasta nunca Shüluter. Espero que la pases muy bien en el otro mundo, viendo como conquisto a tu novia.

***

Los rayos del sol la despertaron.

Eli soltó un quejido.

¿Por qué demonios entraban rayos solares hasta su cama? Si ella misma se había encargado de colocar la cortina adecuadamente.

- Eliana despierta. - escucho a su madre llamarla con seriedad.

Sin querer hacerlo, abrió los ojos y se sento sobre su cama.

- ¿Qué sucede madre? ¿Qué hora es?

- Las siete menos quince.

Parpadeó incrédula.

¿Por qué demonios la despertaba su madre tan temprano si, ese día no tenía que ir a trabajar? La heladería estaría cerrada por cuestiones de remodelación.

- Hoy no tengo que ir a trabajar madre. - le dijo.

Y esta asintió con una expresión gélida y melancólica.

- Lo se.

- Entonces, ¿Qué ocurrió?

Su madre se llevo la mano a la boca cubriéndosela y comenzado a llorar.

Eli se sentó sobre la cama anodada.

¿Por qué estaba llorando su madre? ¿Habría ocurrido algo grave?

- Madre, estás asustandome. - le dijo.

- Lo siento hija.

- ¡Poor Dios madre! Habla ya. ¿Qué ocurre?

- Es Zachary.

- ¿Zachary?

Escucharr el nombre de su novio en los labios de su madre llorosa, le hizo temer lo peor.

- Esta maña, su hermano llamó diciendo que...

- ¿Qué madre?

- Que tu novio había tenido un accidente anoche.

- No. - dijo sin poderse creer aquello.

Eso no podía ser posible. Tenía que haber un error, Zachary no había querido salir de su casa anoche, no podía haber tenido aquel accidente.

- No puede ser cierto. Zachary, no quería salir de casa anoche. ¿En qué momento?

- No lo sé. Pero lo cierto es que, Así fue hija. Zachary salió de casa por algún motivo y...

- ¿Y? - preguntó llorando.

- Ahora mismo se encuentra en el hospital.