LXXV. Comprensión y aceptación
La risa de los demás que se encontraban junto a nosotros alrededor de aquella mesa no se hizo esperar, al notar más que nada con algo de confusión el comportamiento tan respetuoso que Dominieck drásticamente había tomado y que fue por sobre todo objeto de sorpresa para aquellas dos mujeres.

A partir de aquí desayunar se convirtió en una tarea sumamente más cómoda y amena para todos, una que disfrutábamos por igual como si realmente nos encontráramos en medio de una verdadera familia y tanto fue así que incluso Zoe, Leila y Bazili nos acompañaron.

Pasado un tiempo tras terminar la ingesta de aquellos alimentos Dominieck me invito a pasear, aparentemente aquel vio como algo bastante agradable el hecho de dar una pequeña caminata alrededor del jardín, pero totalmente solos, cosa que me ofreció hacer tras ver como yo me había quedado contemplando desde hacía unos cuantos minutos el exterior desde el interior de la casa por uno de los ventanales que dan rumbo precisamente en esa dirección
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo