capítulo 5

POV Juliet

Terminamos el día de trabajo y él pasa por mi a mi nueva oficina para dirijirnos a casa, el día de hoy fue algo intenso luego de ubicarme en la nueva oficina tuve que firmar unos papeles y tuvo una larga video conferencia con el inversionista de mi otro proyecto, siento un intenso dolor en mi cuello. Al llegar a casa decido tomar un largo baño en la tina para relajarme y así quitar la tensión de mi cuello, no sé cuánto tiempo a transcurrido cuando escucho que abren la puerta de mi habitación y pregunto.

—¿Quién anda ahí?—pregunto y en ese momento cristofer entra y se queda parado observadome en la puerta del baño.

—Quise saber si estabas bien, como no bajastes a cenar—me pregunta y se queda ahí parado.

—Solo quería tomar un baño relanjante tengo un dolor en el cuello horrible.— digo y masajeo mi cuello de verdad me duele.

—Si quieres puedo darte un masaje—yo me quedo unos segundo en silencio pensando si estaría bien, entonces al no escuchar respuesta el responde—te espero en tu cama para darte un masaje rápido—dice y sale del baño sin darme la oportunidad de negarme, unos segundos después escucho sus pasos en la habitación.

Salgo de la tina y me coloca la bata de baño al llegar a la cama me espera con una botella de aceite, al verme le da una palmada a la cama para indicarme que tome asiento a su lado.

—Acuestate de espalda—dice y algo incomoda sigo su orden, me pongo cómoda en la cama y bajo mi bata de baño hasta los glúteos dejando mi espalda al descubierto.

Apenas cristofer empieza a hacer masajes en mi cuello, siento como la tensión va disminuyendo, no puedo negar que me siento algo incomoda por el hecho que estoy casi desnuda ante él, pero ha hecho un excelente trabajo por que ya la molestia no está, de hecho me relajado tanto que siento algo de sueño.

Luego de una larga cesión de masajes caigo rendida, al despertar a media noche veo la hora son la una de la mañana cristofer me coloco la bata de baño, por encima y cuando lo busco con la mirada, lo veo a mi lado, el cual está dormido, así que decido acurrucarme a su lado y quedarme dormida de nuevo.

Al levantarme en la mañana siguiente noto que se ha ido así que opto por vestirme y bajar a desayunar, muero de hambre ya que anoche no comí, al llegar al comedor lo encuentro viendo el periódico y desayunando.

—Buenos días ¿Cómo amaneces?—dice tomando un sorbo de café y observado el periódico.

—Mucho mejor, Gracias por el masaje—veo cómo yola sonríe con lo ultimo que dije.

cristofer Toma otro sorbo de café y me dice

—Recuerda que hoy es la cena con tu padre te pasaré buscando más temprano por tu oficina para que nos preparemos.

—Referente a eso, ¿crees que es buena idea ir?.—pregunto y frunce el ceño.

—Claro, es tu padre y si no vamos pensará mal, además no le veo nada de malo que mi suegro quiera comer con nosotros, recuerda que vive solo en una esa enorme.—dice y me causa risa por qué en todo este tiempo nunca lo había llamado así.

—¿Tu suegro?—pregunto.

—Acabo de decir otras cosas y tú ¿solo te fijas en eso? Date prisa que llegaremos tarde—dice y se levanta de la mesa..

Salimos de casa, nos subimos a su auto y apenas nos bajamos cristofer toma de mano, cosa que me toma por sorpresa, por que él nunca ha tenido ninguna muestra de afecto hacia mi, no me incomoda en lo absoluto solo que ¿de cuando acá?.

Al entrar a la oficina todos nos quedan viendo, es primera vez que nos ven así, todos saben que somos esposos pero jamás hemos tenido esta clase de gestos anteriormente, claro si todo es una farsa. Me da un beso en la mejilla y nos separamos cada uno a nuestros lugares de trabajo.

Durante todo el día me quedo analizando el actuar tan repentino de cristofer de estos días ¿Será que le pasa algo? Agotada mentalmente decido empezar a trabajar, cosa que hace que el día se me haga corto y pase volando.

Al caer la tarde cristofer pasa a mi oficina a buscarme para asistir a la cena con mi padre, como habíamos quedado, al llegar a casa tomo una ducha y empiezo a prepararme busco un jeans, una blusa y una chaqueta, Al final de cuentas la cena es en casa de mi padre y él sabe que no me gusta mucho vestir muy formal, suelo hacerlo por que mi empleo lo amerita pero en mis ratos libres visto lo más cómoda posible.

Luego de un rato tocan mi puerta es cristofer quien viene a ver si ya he terminado. Salimos de casa rumbo a casa de mi padre, todo el camino fue tranquilo hablamos un par de cosas pero nada importantes, pero dentro de mí estaba algo nerviosa ¿sera que ha empeorado en su enfermedad? O ¿será que sabe que lo nuestro es una farsa?.

Me preocupa mucho lo que mi padre llegue a pensar, el es mi única familia, mi roca, el es mi vida.

El chofer luego de un rato nos anuncia que ya llegamos, respiro profundo y bajo del auto y ahí está el, perfecto como siempre, no se ante mis ojos así es mi padre el hombre de mi vida.

—!Papi!—corro a sus brazos, no me juzguen este hombre es mi vida y para el siempre seré su niña.

—!Mi Niña!—me da un beso en la coronilla de la cabeza—cristofer, que placer que hallan llegado, pero pasen adelante nana servirá la cena.

—¿Nana? Tengo mucho sin verla—así que soy la primera en entrar y busco a nana, después de la muerte de mi madre ella y mi padre han estado para mi cuando mas los he necesitado.

Luego de ver a nana los tres tomamos asiento a disfrutar la cena en total silencio. Después de terminar mi padre nos invita a ambos a pasar al estudio con el pretexto de que necesita hablar algo con nosotros, cristofer y yo al entrar tomamos asiento en el sofá grande y el toma lugar en el sofá frente al nuestro.

—¿Quieren algo de tomar vodka, whisky?—pregunta mientras busca algo para servir.

—Un whisky para mi esta bien—responde cristofer.

—Para mi nada, padre yo estoy bien así—no es bueno tomar delante de mi padre, no valla a ser que hable más de lo debido.

Mi padre sirve el trago de cristofer, se lo tiende y toma asiento en el sofá de nuevo.

—Quería hablar con ustedes referente a mi salud—el se queda en silencio un momento mientras piensa—mi médico me dio un diagnóstico no muy alentador, el tratamiento experimental no está haciendo el efecto que esperamos...y el Cáncer se ha extendido—apenas termina de hablar y me levanto como loca, ¿no esto no puede ser posible?

—Por que no habías dicho nada—respondo al borde del llanto.

—Yo tampoco lo sabía, fueron los últimos exámenes que arrojaron ese resultado—trato de ser fuerte, pero aún así las ganas de lloran ganan y termino por derrumbarme frente a él.

Se que él necesita que sea fuerte pero no puedo, primero fue mi madre quien se fue sin siquiera compartir conmigo lo suficiente, de hecho ni recuerdo su rostro y ahora mi padre quien a estado conmigo, ha sido mi apoyo y en los días más difíciles de mi vida, me ha guiado y cuidado de mi, gracias a él soy lo que soy y ahora por desgracias de la vida se ira de mi lado.

—!No llores Juliet!—limpia mis lágrimas con sus dedos y me abraza de nuevo, su calor me reconforta un poco, el saber que aún está conmigo me calma ¿Pero que será de mi cuando ya no esté?

El por su parte limpia un par de lágrimas que se le han escapado.

—Quise hablar con ustedes, por que como saben al yo no estar, ustedes serán los encargados de la empresa familiar, solo quería pedirles que continúen haciendo el excelente trabajo que han hecho con la Jhonson corp, dedíquense de esa misma forma con tu empresa Juliet—yo lo miro un poco descolocada—!Si nena! cuando yo no esté todo lo mío será tuyo, los carros, las propiedades, la empresa y por supuesto también de cristofer, como tú esposo el también tendrá derecho.—Que diga eso me da rabia, ¿por que se da por vencido?, si aún tenemos oportunidad de ganar la batalla ante esa enfermedad.

—!No! No vuelvas a decir eso, tú aún estás con vida, y mientras eso pase, tú serás el único dueño—digo mientras limpio mis lágrimas—lo que haremos es que continúaras tu tratamiento y tendremos fe que mejoraras, en cuanto a mi yo te acompañare de ahora en adelante—lo abrazo de nuevo Temo que esta sea la ultima vez que lo vea.

—Juñiet por favor cálmate, esto no le hace bien a tu padre—interviene cristofer me abraza—acompáñame un momento—me pide y se disculpa con mi padre y salimos ambos del estudio.

Caminamos un rato por la casa hasta que llegamos a mi antigua habitación, la cual sigue igual como la deje la última vez.

—Ya es algo tarde deberías descansar un poco, el ponerte así no ayuda en nada, aunque no lo parezca eso le afecta, así que vamos respira—me hace señas para que inhale y exhale—vamos tómenos asiento—ambos nos sentamos en mi antigua cama—si quiere descansa un poco yo iré y conversaré con él y cuando termine yo paso por ti para llevarte a casa.

No muy convencida acepto la propuesta de cristofer en cuestión de minutos y de llorar un poco me quedo dormida, en posición fetal sobre mi cama.

Cuando despierto cristofer me lleva en sus brazos hasta mi habitación, en la casa que comparto con el. Creo que después de todo esa noticia me afectó mucho, apenas me pone sobre la cama el se acuesta a mi lado, y mientras lo observo vuelvo a caer dormida.

*** ***

Al día siguiente me levanto y miro al otro lado de la cama, y el ya no está, solo logro ver una nota que dice con su letra.

Salí a correr un rato, te veo en el desayuno

No se por qué pero al leer la nota siento un extraño mariposeo en mi estomago ¿será que cristofer siente algo por mi?.

En ese momento observo la hora en mi reloj sobre mesa de noche y veo que son las 7:00am así que me levanto de prisa sino llegaré tarde al trabajo, tomo una ducha rápida, me visto y bajo a mil, no se por qué pero me siento como una niña tonta con este cristofer. Al llegar al comedor lo encuentro desayunando con una enorme sonrisa.

—!Buenos días veo que está mejor!—me dice el, mientras yola coloca mi desayuno en la mesa.

—Señora lamentó mucho lo de su padre, pero Dios es grande y no debe perder la fe—me dice ella mientras da un leve apretón a mi mano y yo sonrío con algo de tristeza.

—Gracias yola—digo algo de caída, una parte de mí quería creer que todo era un sueño, pero al despertar veo que todo es verdad y que pronto él ya no estará conmigo.

—Juliet no te pongas así, tarde o temprano todos sabíamos que eso iba a pasar, después de todo por ese motivo estamos casados—dice cristofer tomando mi mano sobre la mesa.

—¿Crees que es fácil?—me levanto de la mesa algo alterada y quito mi mano de su agarre—Mi padre es el que va a morir, tú al menos tienes a tu madre y a tus abuelos ¿Pero yo?—Mi voz se quiebra con lo ultimo pero debo intentar ser fuerte, nadie me puede ver así.

—Juliet no quise que mal interpretaras lo que dije es solo que...—veo a cristofer un poco arrepentido por lo que dijo y trata de acercarse, pero ya es muy tarde yo estoy furiosa.

—Tu nunca haces nada, ¡Cuidado el inocente!—molesta tomo mi cartera y salgo de la casa con intensiones de caminar un rato, tal vez eso ayude un poco.

Camino durante un par de horas y durante todo ese tiempo mi teléfono no para de sonar, algo cansada lo tomo y al ver la pantalla se trata de cristofer, un poco más calmada decido tomar un taxi hacia la empresa, creo que después de todo fui algo dramática, el solo quiso darme una palabra de aliento y yo lo traté mal.

Al llegar a la empresa, subo a mi oficina, y mi sorpresa es que al abrir la puerta consigo a cristofer sentado en mi escritorio, quien apenas me ve se acerca a mi y me abraza sin decir nada.

—¿Dónde te habías metido? Me tenías preocupado.

—Fui a caminar un poco, pero ya estoy aquí—le digo separándome de él, quien se queda observándome.

—Que sea la última vez que te vas como loca y nisiquiera dices a donde—veo en sus ojos una genuina preocupación.

—Disculpa por salir así de casa, es que todo esto me tiene muy mal—le digo y bajo mi rostro algo avergonzada por cómo lo traté.

—No Juliet, perdóname tú a mí, por no ser un poco más comprensivo—dice y me da un pequeño beso en la coronilla de la cabeza—¿Te gustaría almorzar conmigo?—pregunta con una pequeña sonrisa.

—Si —respondo mirando el suelo aún.

—Entonces pasó por ti en un rato—dice, levanta mi rostro, besa mi mejilla y sale de la oficina.

Todo esto de mi padre me tiene mal, estresada y a eso se le suma el repentino trato de cristofer, me gusta que me trate bien, pero eso me asusta.

Como había dicho cristofer así fue, el paso a las doce por mi y ambos nos fuimos a comer juntos, durante la comida, todo fue tranquilo conversamos de algunas cosas en verdad fue agradable estar tranquilos sin pelear, son pocas las veces que eso a pasado pero esos momentos siempre los voy a recordar.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo