Capitulo 4

- A mi casa -respondo cansada, lo único que quiero en ese momento es poner los pies en alto y dormir muy cómodamente.

Siento su mano agarrando mi muslo, todo mi cuerpo se tensa al mismo tiempo.

- ¡Relájate amor, cuando lleguemos a tu casa te haré ver estrellas!

- ¿Qué quieres decir? - Pregunto, conteniéndome para no gritar.

- Te vas a correr mucho en mi p.a.u." dice sonriendo y siento que se me revuelve el estómago.

- No-No... ¡No vamos a tener sexo!

- ¿Por qué no? - retira su mano de mi muslo, respiro aliviada.

- Porque no quiero -respondo con firmeza.

- ¿Así que tengo que aceptar un hijo que ni siquiera es mío, casarme contigo en quince días y no quieres ni regalarme una piriquita? O mejor aún, ya llevamos un mes saliendo y ni siquiera me has dado un beso con lengua. - me mira con incredulidad.

- ¿Su sueño no es tener una familia?

- ¡Quiero follar contigo!

Ahora soy yo la que tiene una mirada incrédula, las palabras de mi madre vuelven a mi mente, "sólo eres una zorra que se van a comer y a tirar", la ira se apodera de mi mente.

- Detén el coche - ordeno.

- ¿Qué es?

- Te dije que detuvieras el maldito coche, ¡déjalo ya! - Digo en voz alta y él frena bruscamente.

Abro la puerta y salgo, pero antes de cerrarla:

- Eres un hombre asqueroso, ¡ni siquiera deberías considerarte un hombre! - Doy un fuerte portazo."

Sacudo la cabeza para apartar esos recuerdos de mi mente, me siento desesperada.

- No te preocupes hermanita, lo encontraremos- ella habla con seguridad.

Sólo asiento con la cabeza, es como dicen, la esperanza es lo último que muere. Después de quince minutos aparco frente al orfanato y respiro profundamente, voy a matar el ansia del fin de semana lejos de ella.

Durante este año y medio, conocí a más de doscientos hombres, y entre ellos siete aceptaron casarse para adoptar a la niña, sin embargo, querían algo "más", antes de tiempo y aunque realmente quería adoptar a esta niña, no pude meterme en la cama con ninguno de ellos. De estos siete, cinco vinieron a conocer a mi niña, pero a ella no le gustó ninguno y se puso traviesa.

Después de quince minutos aparco delante del orfanato y respiro profundamente, voy a matar el ansia del fin de semana lejos de ella.

[ Visión de Leandro Silva]

- Leandro - Oigo la voz del señor Gustam y dejo de caminar, me vuelvo hacia él, no es común encontrarlo aquí.

- ¿Hay algún problema, señor? - Pregunto preocupado, ¿será que hubo algún error en los informes de mi sector? Imposible, Aya siempre comprueba todo.

- No, no, tú y Aya siempre hacéis un gran trabajo - me siento aliviado, luego continúa: - Es otra cosa.

- ¿Qué es?

- Mi hijo está volviendo de un viaje, por fin ha terminado sus estudios y ahora ocupará mi lugar como presidente de esta empresa.

Sus palabras pesan en mi mente, siento la culpa pesando en mi conciencia, nunca le pedí perdón a Iuri por las cosas que le dije e hice, pero quién iba a imaginar que acabaría trabajando para su padre y por consiguiente para él. No sé cómo me enfrentaré a él, pero espero que no me despida, en un solo año conseguí un puesto muy alto, ahora vivo bien y tengo mi propia casa y familia. Luana está embarazada de cuatro meses.

La mayoría de los recuerdos que tengo no son buenos, recuerdo que hace más de veinticinco años mi madre se casó con Carlos cuando yo tenía cinco años, mi padre había muerto en un accidente de coche, estaba borracho y chocó contra un poste, el coche explotó y murió en el acto, ni siquiera recuerdo su cara, lo único que recuerdo son las palizas que nos dio a mí y a mi madre. No dejó nada, y en apenas seis meses, mi madre conoció a su "marido", al principio era simpático, tenía unos cuarenta años más que mi madre, la trataba bien, pero después de que yo cumpliera doce años, se retiró y se convirtió en un viejo repugnante, no soportaba ni estar en su misma presencia.

Después de la muerte de mi padre, me convertí en un niño complicado que sólo se metía en problemas y se burlaba de la cara de los demás, la persona con la que más me metía era precisamente Iuri Stevens, el hijo de mi jefe. Con el paso del tiempo, practicando esas cosas me cansé, no voy a mentir diciendo que me convertí en un ejemplo de persona, hice algo con Aya que sé que nunca será perdonado, aunque ella me dijo que dejara el pasado donde está, en el pasado.

- Me alegro Sr. Stevens - Acabo tartamudeando, ¡qué demonios!

- Bueno, quiero que llegues mañana temprano y junto con los demás directores, anunciaré la llegada de mi hijo -habla con una enorme sonrisa, a pesar de todo estoy muy contento, sé lo mucho que el señor Gustam esperaba con ansias el regreso de su hijo.

- Eso está bien - sonrió amarillo, me temo. Pero si me despide, estará bien hecho para mí, nadie me dijo que fuera tan idiota.

Ah, esa m*****a pelota, aún recuerdo haber visto por primera vez el odio en los ojos de Iuri:

"Sin decir una sola palabra, Iuri se acerca a mí, levanta su mano con el puño cerrado y me da un golpe de derecha en la boca. Es mucho más bajo que yo, pero me lo merezco, así que no descuento y no  defiendo, simplemente acepto el golpe.

- Eres una basura, una escoria, lo que hiciste en la vida de esa chica es imperdonable, ¡eres peor que la m****a! - la verdad duele, lo que dices es imperdonable.

- Lo sé.

 Es todo lo que puedo decir" - la voz del Sr. Gustam me saca de mis pensamientos.

- Bueno, ya puedes irte - se da la vuelta y se marcha por donde ha venido.

Me dirijo a mi coche y, al entrar en él, saco el móvil del bolsillo de la chaqueta y tecleo el mensaje que notificará a todos, pulso adelante y el mensaje llega a todos los directivos informándoles de que deben estar todos en la empresa a las siete y media de la mañana. La presentación del nuevo presidente de la empresa durará media hora.

Respiro hondo, no voy a poder sacar a mi mujer a pasear, voy a estar comiéndome la ansiedad y el miedo hasta que llegue la hora de conocer a Iuri.

Miro mi reloj de pulsera y son las cinco de la tarde, ella sigue en el orfanato, compraré comida preparada para nosotros. Como hoy es el cumpleaños del niño de Aya, no debería llegar hasta las ocho de la tarde. Respiro profundamente, mañana será un día largo, me estaré comiendo la ansiedad y el miedo hasta que llegue la hora de rencontrarme con Iuri.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo