Ignacio
Falta poco para terminar la práctica, si anoto habrá empate le doy una pequeña sonrisa al maldito de German, que siempre me hace mala cara en especial cuando mi equipo y yo le ganamos.
Miro a Elior el tiene el balón, levantó las manos para que me haga el pasé, Santiago le roba el balón a Elior. Pero ahora yo sé lo quitó a él y este es mi momento de meter un Golazo de los que tanto me gusta, que Jon el portero ni cuenta se da. Enseguida los de mi equipo no alegramos pero Germán está serio se nota que le dolió el Golazo.
Camila Hoy en la clase de literatura, el profesor nos mandó a leer un libro y dijo que podíamos escoger el que quisiéramos, yo me voy a leer el de Don Quijote de la Mancha. Ceci me imagino, que escogerá lo mismo que yo. Es que a ella le da pereza leer. Entonces siempre le hago un resumen de lo que leo. Para que ella pueda pasar su examen. Si ella es perezosa para leer, pero para matemáticas es la más brillante de la clase. Cuando salimos de clase me dice —¿Ya escogiste el libro que leerás? —Si, escogore Don Quijote de la mancha —le digo en un tono de voz suave. —¿haras mi resumen? —pregunta arqueando la cejas. —Sí y tú me ayudarás con mi tarea de matemática —le digo con una pequeña sonrisa. —trato hecho señorita —dice en un tono suave. —¿Qué tal tu cita de ayer? me imagino que estabas de paseo con un chico, porque te escribí y no me contestaste —le digo con una sonrisa. —Si bueno, fui a tomar una bebida con Gustabo, un hombre que conocí en el bus. Me dijo que tiene vei
Ignacio Estoy sorprendido y algo asustado, ¿es que, quién quiere ser padre con veinte años? En fin le devuelvo la llamada a Barbie. —¿Cómo que tienes un retraso tu me dijistes que te estabas cuidando? —le contesto serio. —No se que paso cielo yo me estaba cuidando. —Mañana vamos al médico quiero que te hagas la prueba de embarazo. —¿Que vamos hacer si sale positivo y estoy embarazada de ti? Me coloco la mano en la cabeza, pasándola por mi cabello —Barbie eso lo hablaremos después que veamos los resultados —le cuelgo. No se que hacer, Camila va odiarme, la presidenta va desheredarme y mi abuela va a golpearme. ¿Qué hago? Estoy perdido, le timbró a Elior no respondes, le timbró a Bradley tiene el móvil apagado. Para que tiene móvil, si no van a contestar. Que m*****a frustración siento, en qué lío me metí. No ahora sí me van a matar mi abuela, Camila y la presidenta. Quisiera contarle a Camila lo que me está pasando. Antes le contaba todo y eso me hacía sentir bien, me daba
Camila Su cara está cerca de la mía, pero el volteo su rostro y no me besa solo me abraza. —Ignacio alguien puede vernos —le digo nerviosa. Porque los de seguridad están dando vueltas por la mansión. Intento soltarme de él pero no me deja. Le hace seña con la mano de adiós, para que se vaya a uno de los de seguridad. Que estaban por ahí, volteo y el hombre alto y musculoso se va. Mientras, él me sigue rodeando mi cintura con la otra mano. El mira su reloj, que es un Rolex resistente al agua y dice —Son más de las once pecosa, todos los empleados deben estar durmiendo. Y vuelve poner su cara en frente de la mía yo le acaricio su mejilla lentamente, el cierra sus lindos ojos verdes. Puedo ver que ya no está tenso. Se que esta relajado. Luego los abre, y me sonríe bajo mi mano. La coloco a mi alrededor en el borde de la piscina. Porque no quiero cruzar la raya y besarlo solo nos miramos, no sé en qué momento. Pero como siempre... parece saber lo que estoy pensando. En pocos seg
—Que damos en qué te ibas alejar de ella Ignacio —me reclama Bradley serio. —¡Eres un maldito desgraciado si le haces daño a Camila te la vas a ver conmigo! —exclama Elior molesto. —Que todavía no superas que Camila me eligió a mí y no a ti —le respondo fríamente. Elior se levanta y me mira con una profunda molestia. —Yo ahora veo a Camila solo como una hermana —lo dice afincando las palmas de sus manos sobre la mesa. —Basta —protesta Bradley levantándose mirando a Elior y luego a dónde estoy yo. —Pensé que habían dejado en el pasado ese triángulo amoroso, que desde niño tenían por Camila —responde Bradley serio. Elior se sienta aunque todavía está enfadado. Bradley sigue de pie y continúa hablando. —Nunca me he metido en tus relaciones Ignacio, pero como amigos que somos. Te lo digo, deja en paz a Camila ella es como una hermana para mí también. No quiero que la lastimes, ella no será otra más de tus víctimas —lo dice serio. —Quiero que la dejes en paz, maldito desgraciad
Ignacio Al día siguiente, es viernes llegó al salón Bradley se sienta detrás de mí —Que hay de nuevo Ignacio —saluda el. —Nada nuevo Bradley —le respondo. —¡¿Todo bien tigre?! —me dice Elior con una pequeña sonrisa —mientras, se sienta a mi lado —Si —le digo moviendo los hombros. Escucho el sonido de las laptop cuando las abren. Barbie me lanza un beso desde alante dónde esta sentada, al lado de su amiga Natasha. La ignoro porque hoy la voy a cortar. Desde anoche no dejo de pensar en lo mal que trate a la pecosa y no sé porque pero me duele. Quisiera que no fuera así pero todo lo que tenga que ver con ella me importa. Esa es la verdad. El profesor acaba de llegar es un señor como de unos cuarenta años de edad. Bajo y un poco obeso, usa gafas redondas. —Buenos días estudiantes —saluda cuando entra. —Buenos días —es lo que se escucha cuando mucho devolvemos el saludo. El se sienta unos minutos frente a su escritorio, luego se levanta —hoy hablaremos de grandes pensadores. —Dí
Camila Ya hoy es viernes, Ceci no vino a clase hoy. No se porque. Se me quedó el móvil y no puedo preguntarle ¿Por qué no vino? Estoy sentada en un banco de la preparatoria alrededor hay árboles y otros bancos. En el centro hay una fuente Ceci y yo a veces no sentamos aqui. A esperar las otras materias que nos toca. Si aquí hablamos, nos tomamos fotos en fin reímos y conversamos. Anoche no dormí, "de tanto llorar" porque las palabras de Ignacio... lastimaron mi corazón. Mi ojos están inflamados quiero darme por vencida. Si lo pienso mejor, es bueno que Ceci no haya venido. Porque siento vergüenza de contarle que "Ignacio me volvio a rechazar" Como lo hizo un día después de mi cumpleaños, hace seis meses. *Flashback* Mañana es mi cumpleaños número diecisiete. Le dije a mi madre que saldria en la tarde con Ceci. Pero es mentira porque la verdad es que saldré con Ignacio. El prometió darme una sorpresa por mí cumpleaños. Siempre le oculto a mi madre cuando salgo con el. Porque a
Camila —Ignacio di al... no termino la palabra algo. Porque él me interrumpe. Se acerca más coloca su dedo pulgar sobre mis labios. Lo pasa varias veces por mi labio inferior, sus dedos son tan suaves y luego por el superior, con delicadeza como si los estuviera preparando... para él unos segundo después deja su mano al lado de mi rostro. Se acerca y cierro mi ojos porque creo que va a besarme. Sus labios tocan los míos, el beso no es rápido ni lento es tierno. Coloco mis manos alrededor de su cuello un poco nerviosa porque es la primera vez que nos besamos. Mi primer beso fue con Ignacio, el coloca una mano en mi cintura me atrae más hacia su cuerpo. Y la otra la sigue dejando en mi cara. Sus labios son suaves y húmedos con un sabor a menta y a champaña. Me gusta ese contacto que hicieron nuestra lenguas cuando se tocaron, por primera vez y nuestro cuerpos están tan pegados que escucho su corazón acelerado. Mientras yo siento algo en mi estómago y creo que son las famosas marip
Camila Al día siguiente me levanto con un hambre. Es que me acosté temprano anoche y se me olvidó cenar. Al revisar mi móvil. Leo que hay otro mensaje de Ignacio. *¿Podemos hablar pecosa? El mensaje es de anoche cómo a las diez, Ignoro su mensaje. Me levanto y voy al baño a lavar mis dientes, luego me doy una ducha rápida.Me colocó un una bragas, brasier, un short que me llega hasta mis rodillas y una blusa de tiras con mis cómodos tenis. Bajo a desayunar, después ayudo a mi madre en la cocina. La señora Ofelia no está, fue a hacer las compras del mercado. No ví hoy a Ignacio, tampoco respondo su mensaje de anoche. Además creo que no está. Los sábados en la mañana se va a trotar y luego se va a jugar golf... con Elior y Bradley. La mañana y parte de la tarde se me fue entre ayudar a mi madre en la cocina y a María a hacer el aseo de la mansión. Más tarde subo a tocar un rato el piano. Cuando termino bajo saco de mi closet un bonito vestido rojo, unas sandalias de tacon pun