(septiembre 29, 2018 Chicago, Illinois)

(Bruno Salvatore)

            Son las dos de la mañana cuando la detective me dice.

-Según la compañía no se ha tenido señal alguna de su hija desde el miércoles pasado a las cuatro de la tarde, seguiremos buscando, pero el área donde se perdió la señal es un área de grandes mansiones y propiedades privadas, no creo que en alguna de ellas este su hija, pero… bueno un representante de la compañía traerá un emisor/receptor para buscarla más de cerca. Por favor no pierda las esperanzas.

            Hace un muy buen rato vi llegar a varias personas, seguramente los padres de las otras tres niñas; debo estar atento pues el Capitán Anderson es viudo y sabe que su pequeña solo es amiga de mi princesa.

            Me retiro al hotel más no duermo mucho pues solo pienso en mi hija, en lo que puede estar sufriendo o si la han asesinado y yo no tenga siquiera un cuerpo al que llorar.

            A la mañana siguiente tras desayunar, hice los arreglos para el traslado de los cuerpos de Santiago y Miguel para que sus familias puedan honrarlos y sepultarlos como merecen y no terminan en una fosa común.

            Para medio día el Capitán Jhon Anderson llego y al verme pregunto

-Que ha pasado? ¿En dónde está mi hija?

-Capitán Anderson, secuestraron a las niñas, no se preocupe, no solo se llevaron a Flora y Andrea, se llevaron a otras tres algo mayores.

-Porque? Ya han pedido algún rescate, tengo algunas inversiones que pondré a la venta, solo quiero a mi Florecita de vuelta. - el hombre estaba desesperado.

-No te preocupes yo pagare los rescates, esas inversiones son el Futuro de Florecita, sin ella Andrea sería muy solitaria.

-Gracias Bruno, por cuidarla a ella también.

- ¿Cómo no hacerlo, es una niña dulce y me hace reír con sus ocurrencias, sabes que planean disfrazarse de Cleopatra y Ahmanet ese par de traviesas para la fiesta de Halloween? Le digo para distraerlo.

-Que? Flora no me dijo nada.

-Pero si ya hasta mandaron llamar a la costurera; sobra decirte quien es la primera, pero de la segunda tuve que enterarme por una película llamada “La Momia” con Tom Cruice.

-Sí, creo haberla visto con Flora hace unos días en casa.

            El Capitán paso por el mismo interrogatorio que yo con la detective. Por mi parte, hice venir a varios de mis hombres para que busquen a mi hija.

            En el centro comercial hay cámaras, pero no en el baño, pero en una de ellas que da al pasillo de servicio, se alcanza a ver como Santiago es golpeado y asesinado al igual que Miguel y como seis hombres se llevan a las niñas, solo vemos a Andrea y a Flora.

            En otra área del centro comercial, otro hombre ésta hablando con Joanna, otra de las chicas secuestradas y se ve como otro hombre se acerca y le inyecta algo en el cuello, la chica se indispone y uno de ellos la lleva cargada.

            Vemos como Melissa es secuestrada de la misma forma al salir de una zapatería, pero a Sophía, la sujetan entre dos hombres y un tercero la golpea dejándola sin sentido, una se la hecha al hombro como un saco de papas y se la llevan.

            Las cámaras exteriores mostraron que a Andrea y a Flora las subieron en un monovolumen blanco sin marcas y a las otras tres las tres las subieron en una ambulancia a Melissa y Joanna y en una camioneta negra a Sophía.

            Las cámaras de trafico los sigue por diferentes lugares, pero las pierden.

            Han pasado una semana y aún no sabemos nada de las niñas, tampoco han pedido rescate alguno, el Capitán ha estado aquí todo el tiempo, al principio estaba desesperado y lloroso, pero ha comenzado a calmarse; creo que ésta dando por perdida a su hija, lo cual confirmo cuando me dice.

-Bruno, no han pedido rescate alguno, ni han dicho nada, no hay más pruebas ni pistas, ¿crees que podremos recuperarlas?

-Eso espero Jhon, no pierdas las esperanzas.

-Es difícil mantener viva la esperanza cuando no hay ninguna pista. Bruno yo bebo volver al trabajo, Flora regresara y yo debo darle todo lo mejor.

-Yo me encargare de cuidarla y avisarte si hay algo.

            Una semana más tarde, para ser precisos el jueves dieciocho de octubre, veintidós días después de ser secuestradas, la compañía recibió la señal de Andrea por unos minutos antes de volverla a perder, seguía en la misma área en donde se perdió la señal.

            La desgracia llego el domingo veintiuno, cuando el cuerpo de Flora fue encontrado a las orillas del rio, la necropsia mostraba altas dosis de heroína, así como que había sido violada salvajemente y golpeada ya que tenía tres costillas rotas, así como la muñeca derecha; su cuerpo mostraba señales de ataduras, golpes y torturas, pues pude reconocer algunas quemaduras de cera o cigarros.

            Exigí ver el informe de la necropsia y al leerlo me di cuenta de que lo que me dijeron no era todo, Flora tenia desgarres vaginales y anales y para colmo tenía dos semanas de embarazo, el contenido de su estómago solo era sopa y pan, además de semen, al parecer quienes la secuestraron la violaron o la prostituyeron.

            Hice los arreglos para su traslado y cremación y me comunique con Jhon su padre, fui a Chicago para llevarle el cuerpo de su hija, estuve con él cuando cremaron el cuerpo y cuando en el servicio religioso los alumnos de la escuela le presentaron sus respetos, pero no pude prever lo que un hombre dolido y que lo había perdido todo haría.

            Ahí, frente a la urna con las cenizas de Florecita y ante todos los presentes, Jhon se voló la tapa de los sesos, muriendo al instante; hice arreglos para que fuera cremado y pusieran sus cenizas junto a las de Florecita en una cripta de la catedral, pues el hombre acabo con su vida al haber perdido a su amada hija.

            Dos días después un abogado me visito en casa para anunciarme que Jhon había dejado todo lo que tenía a Andrea, así como una carta para Andrea y otra para mí.

            Firme todo y arregle los asuntos, no podía rechazar una herencia que no era para mí; tome la carta de Jhon me dejara y comencé a leerla.

*Carta de Jhon Anderson

- “        Bruno, si estás leyendo esto, es porque me he suicidado, esto solo pasara si mi amada Florecita, el único amor que me queda en la vida tras la muerte de mi esposa Rosa María ha desaparecido.

Sé quién eres y a lo que te dedicas y no me importa, en tu conciencia estarán tus actos, también se porque Andrea es como es, una niña de carácter fuerte y decidido que no perdona ofensas pero que es una amiga fiel y leal.

Sabes bien que debido a mi trabajo casi siempre estoy fuera y saber que mi pequeña hija era abusada por otros chicos no era de mi agrado, pero solo podía poner quejas que al colegio poco le importaban.

Fue gracias a Andrea y su amistad que mi hija comenzó a florecer, disfrutando de su etapa educativa, a ella no le importaba solo tener una amiga, a tú hija Andrea. Ella la cuido y la protegió y si he visto bien a mi hija hasta la ha enseñado a defenderse, a confiar en sí misma y eso lo agradezco mucho.

He pensado esto los últimos días y sé que mi hija no tiene oportunidad de sobrevivir a menos que Andrea la proteja, pero he hablado con varios detectives y tras hacer investigaciones todos coincidieron en que las cinco niñas fueron secuestradas por traficantes de mujeres, lo que se traduce en que difícilmente recuperare a mi hija, más como dijiste no debo perder la esperanza.

Otra teoría es que las secuestraron para venderlas a prostíbulos de alta gama, el tipo de lugares en donde hombres y mujeres de mentalidad retorcida y perversa y con gustos malsanos y sádicos usan a niñas y adolescentes como juguetes sexuales.

En mi corazón espero encontrar a mi amada hija, aun cuando tenga que pasar los próximos diez años en terapia por lo que esté sufriendo ahora mismo.

Aun así, he decidido que, si llegase el caso de que mi hija se encontrada muerta, yo no le sobreviviré mucho tiempo.

He hecho mi testamento en favor de Andrea, sé qué comparado con tu fortuna, lo que yo le dejo es nada, solo te pido un favor, acaba a la bestia que daño a mi pequeña Florecita.

Sé que estarás preocupado, pues tú propia princesita ésta en el mismo barco, pero como dije, tu Andrea es más fuerte y ella lograra sobrevivir dónde otras no, tú te encargaste de enseñarla.

Pongo mi última esperanza en que recuperaras a Andrea y que ella recordara con cariño a mi Florecita

Cuando Andrea vuelva a tu lado ayúdala a levantarse, no la levantes, eso la hará más fuerte y solo dile de mi parte GRACIAS por querer a mi hija.

Atte. Jhon Anderson

Pastada: Como único favor te lo pido, encuentra a los que hicieron esto y acábalos, por el bien de Andrea, pues justicia no habrá, pero venganza si tendrá.”

La carta de Jhon solo me deja ver que era un hombre consiente y nada tonto, él no tenía prejuicios, vivía a lado de mi casa y su hija compartió mi mesa a sabiendas de que soy uno de los jefes de familia de la mafia italiana, él estaba seguro de que como Flora era amiga de mi hija yo cuidaría de que nada le pasara cuando él no estaba.

En cuanto a buscar venganza, eso no lo puede nadie poner en duda, pero antes debo saber quién secuestro a las niñas y en donde ésta, juro por la virgen que no le dejare un hueso sano al perro malnacido que secuestro a mi hija para violarla o para prostituirla.

Regreso hoy mismo a Nueva York, mis hombres han encontrado información, el Rey de la Bratva tiene una guerra personal con un perro sarnoso que está prostituyendo niñas, cuando ataca, rescata a las chicas enviándolas a hospitales al parecer el malnacido se ha tomado la tarea de atacar a las amantes o examantes de Danko así que estoy decidido a ir a hablar con él, puede que él sepa algo que la policía no.

Es tarde cuando llego a Nueva York, uno de mis hombres me informa que alguien ataco a la mujer de Danko quién estaba internada en el hospital por problemas cardiacos, pero el ataque provoco que tuvieron que operarla tratare de verlo más no sé si sea oportuno o si al menos quiera recibirme.

Mando a uno de mis hombres al hospital, si Danko deja el hospital será que tendré la oportunidad de que me reciba.

Es más, de media noche cuando recibo la información de que Danko se ira a su mansión, así que pido preparen los autos para ir a verlo.

Cuando llego a su mansión veo a un gran número de hombres para la vigilancia, debe temer ataques en la propiedad.

Me recibe un hombre y me indican que espere por lo que me llevan a una sala, al parecer Danko estaba cenando.

Cuando por fin me recibe y hablo con él, comprendo que era urgente y acordamos ayuda mutua, pues al parecer el desgraciado que secuestra y prostituye niñas es el mismo que busca a las mujeres de Danko.

Cuando me retiro lo hago con la convicción de que tarde o temprano atraparemos al maldito y lo acabaremos.