—Solo eche un vistazo al interior, Athena—, dijo señalando la puerta que lleva al pasillo lleno de gente bailando y conversando, —¿Qué ves?— Athena hizo lo que le pidió, miró dentro del pasillo y los vio, las personas bailando, las mujeres vestidas con una hermosa ropa atractiva, los hombres vestidos con los agradables smoking, hablando entre ellos y algunos bailando con las mujeres. Miró hacia atrás a Frank. 

—Pero Frank...

—Ahora échenos un vistazo a usted misma y a mí, ¿Qué diferencia ves?— Él interrumpió. Athena se miró a sí misma, y supo que el vestido que llevaba no estaba en clase con los que usaban las mujeres adentro, lo miró y él estaba vestido con un agradable smoking, al igual que los hombres dentro. Ella sabía lo que quiere probar, pero ella simplemente no quiere aceptarlo.

—Frank por favor...

—¿Ves de lo que estoy hablando? Perteneces aquí, Athena, con esta gente, pero no lo quieres aceptar. Mírate, eche un vistazo a lo que usaste para la fiesta.

—Este es mi mejor vestido y lo sabes, Frank, nunca te humillaré intencionalmente—, se ahogó con las lágrimas y cerró los ojos —¿Te gustó cuando lo utilicé? Ese día fuimos a observar los fuegos artificiales, dijiste que me veía hermosa en el, por eso lo llevaba, porque quiero que veas que soy la mismo Athena, Frank, soy yo, no me hagas esto. Muchas cosas me han pasado muchas cosas durante las últimas dos semanas, ni siquiera se molestó en buscarme, ¿Por qué Frank?— Frank se limpió la cara de una manera frustrada.

—Escucha, ya te lo dije, las cosas han cambiado Athena, Mírame, ya no soy el mismo Frank, he cambiado. Ahora bebo y ceno con celebridades, grandes empresarios, mi vida ha cambiado Athena y me adapté. Pero tú—, Él señaló con su dedo, —nunca cambias, eres la mismo Athena, año tras año, no te sucede nada. Vimos ese fuegos artificiales hace dos años y todavía tienes este vestido, nunca compras nada nuevo, sigues reutilizando todo lo que tienes.

—¿Cómo puedo comprar algo nuevo, Frank, he estado pagando nuestras deudas, las que obtuve a causa de ti, prometiste devolverme el dinero para pagar, nunca lo hiciste y estoy usando todo mi salario para pagar las deudas. ¿Cómo puedes esperar que compre algo nuevo? ¿Cómo puedo hacer eso?

—Escucha, Athena, sé que te estoy debiendo y le devolveré, lo prometo, solo déjame tener ese dinero, te encontraré y te pagaré cada centavo, pero lo siento, como dije antes, ya no podemos estar juntos, ya no eres la mujer para mí, ya no estamos en el mismo círculo social, por favor, deja de venir a buscarme, no quiero que mis nuevos amigos te vean o sepan que alguna vez me he asociado con usted—. Levantó un profundo suspiro, luego se volvió y entró hacia el pasillo.

Athena lo vio irse y ella lo vio acercarse a una hermosa rubia que puso su mano en su brazo y juntos, se unieron a otro grupo de personas. Las lágrimas se arrastraron por sus mejillas y ella ya no se molestó en limpiarlas, ella miró su vestimenta, se había esmerado tanto para que no se sintiera avergonzado por ella, pero aun así él lo está.

El vestido negro que tenía en ella fue comprado por su madre, fue la única ropa costosa que tenía y Frank le había amado la primera vez y otras veces que lo había usado, excepto hoy. Los zapatos negros que calza pertenecían a su madre y, aunque sabía que no fue con el vestido, pero no obstante, la había usado porque era lo único que no tiene un agujero en él.

Mirando a Frank por dentro, sabía que necesitaba dejar de engañarse, nunca la querrá de nuevo, nunca volverá a amarla como antes. Se volvió y se subió las escaleras; Fue a la fuente y se sentó en ella, sus lágrimas se mezclaron con el agua. Cerró los ojos y los fragmentos de una noche hace dos semanas pasaron en su mente. Ella sacudió la cabeza bruscamente, ella había querido contar lo der esa noche, a pesar de que sabía que podría odiarla después de descubrirlo, pero a ella no le gustaba esconderle nada a él y menos algo de esa naturaleza, pero, ¿Qué le garantiza que no la rechace justo como lo hizo esta noche?

Ella se limpió las lágrimas, sollozando suavemente y escuchando la música distinta, allí estaba el hombre de sus sueños, probablemente bailando con otra mujer y aquí estaba llorando incluso después de asistir a la fiesta solo por él, pasando por todos los problemas.

—No debes dejar que te afecte así—, dijo alguien y se giró bruscamente, podía ver una sombra cerca de las flores en forma de animal, —no debes permitir que ningún hombre lo haga.

—¿Quién eres?—Preguntó, levantándose de la fuente donde se sentó.

—Sólo alguien que está preocupado por ti— Athena se limpió las lágrimas.

—Gracias, pero estoy bien ahora, por lo que ya no necesitas preocuparte.

—¿Es eso lo que te estás diciendo a ti misma? Lo siento pero nunca quise espiar tu conversación pero cuando te vi entrar a mi casa, primero me divertí pero luego me di cuenta de que me recuerdas a alguien y te había seguido, aunque normalmente no es lo mío, pero ¿Quién hubiera esperado que escuchara lo que escuché?

—No deberías espiar la conversación de la gente—, quería reprenderlo, pero luego recordó lo que dijo —oh Dios, lo siento mucho, prometo que no soy un ladrón, la seguridad no me dejó entrar y realmente quería hablar con mi novio, así que hice lo que tenía que hacer, lo siento mucho—, dejó salir una serie de disculpas. El hombre al lado de las flores se río, un sonido bajo y rico que le dijo que no debería meterse con él.

—Creo que deberías decir ex novio por lo que escuché—. Esa verdad siendo arrojada a ella por el extraño, no pudo ocultar el dolor que brillaba a través de sus ojos, ella miró hacia otro lado de su sombra y cerró los ojos, deseando que las lágrimas no cayeran. —Sabes, está bien llorar después de una ruptura, pero si me preguntas, un hombre que deja a una mujer por lo pobre que se viste no es más que un cobarde. Las mujeres son elegantes por naturaleza, solo tienes que invertir en ellas para conseguir lo que quieres y que ella crea en su calidad natural—. Athena agitó la cabeza suavemente ante lo que dijo.

—No, no soy esa mujer, las que encajan en tu descripción son las que bailan dentro—, apartó la mirada de él y secó sus lágrimas, —Nunca podré ser ellas—. El hombre en las sombras respondió.

—Solo crees en eso porque él lo dijo—, salió de la oscuridad y se acercó a ella con suaves y elegantes movimientos, —cada mujer es única, elegante y sensual, solo tienes que sacarlo—. Al oír sus palabras y lo cerca que sonaban, lo miró solo para jadear y cubrirse la boca con las manos; dio un paso atrás, pero olvidó que estaba cerca de la fuente, por lo que cayó hacia atrás en el agua. Ella sumergió de inmediato, sus ojos todavía centrados en el hombre que ni siquiera cambio en su posición o incluso se molestó con ayudarla. Se sentó en la fuente, su cabello goteando agua sobre su cuerpo ya mojado. Cuando superó su shock, gritó.

—Tú— El hombre ante ella sonrió y caminó más cerca, luego ofreciendo su mano.

—Hola Athena.

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Hola queridos, ¿cómo han estado todos?

 Por fin he comenzado una nueva historia y espero que a todos les encante y la disfruten como lo hicieron con el resto.

 Además, tengo un favor que pedir, como todos sabéis que mi español no es muy bueno y que tengo un amigo que me ayuda a traducir los libros, la cosa es que mi amigo ya lleva un tiempo ocupado y si  Noté, hace tiempo que actualicé un libro, es porque la estaba esperando pero luego decidí traducir el libro por mi cuenta ya que ella se está demorando.

 La verdad queridos míos, estoy seguro de que habría errores, por eso les ruego que tengan paciencia conmigo, una vez que mi amiga haya terminado lo que está haciendo, le enviaría los capítulos y después de que ella los haya corregido.  , Subiré los corregidos pero ahora, el libro sería traducido por mí.

 Espero sinceramente que los errores no te hagan no leer la historia y que entiendas y sigas leyendo el libro y, con suerte, te encantará como lo hiciste con todos mis otros libros.

 Muchas gracias por su apoyo, lo aprecio profundamente 🙏