Capítulo 9: El dedo en la llaga

¿Qué clase de mujer soy?

¿Cómo puedo llorar, lamentando no haber aceptado una propuesta que me dejaba en tal mal lugar?

La respuesta estaba en mis narices, porque sabía que si aceptaba una relación así, me perdería, que jamás podría escapar de ella, que no podría desligar mis deseos de mis sentimientos. Porque era innegable, sentía cosas por Peter más allá del sexo. Quería más que eso y él no podía dármelo. Sabía que tomé la decisión correcta, pero eso no significaba que me aliviara. No lo hacía ni un poco.

—Estás rara, Nat. Dímelo.

—Soy rara, Ming. No recuerdo ni mi nombre.

—Hay algo más. Los ojos te brillan de una forma extraña, estás distante, has tomado mal tres órdenes. ¿Tiene que ver con Peter?

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo