En aquel momento la oficial sonrió de un modo casi melancólico – chica puedes decirme Lotto si lo deseas… ese es mi nombre –

Sonreí levemente – trataré de no olvidarlo, de igual modo debemos movilizarnos… si me entretengo demasiado con ustedes los otros pacientes corren peligro –

Tras aquella conversación los dejé en sus cuartos antes de retirarme a revisar a los otros y luego dormir un poco… Al día siguiente me correspondía llevarlos al ala de experimentos, sin embargo está ocasión me acompaña uno de los perdidos … una vez cumplí mi parte me aleje

…

Este modo de alejarme de todos se volvía rutinario, casi tanto como ayudar a llevar a los pacientes hacia la sala de experimentos… sin embargo al llegar la tercer prueba las cosas salieron de control ese día en particular las pruebas fueron al límite físico de los pacientes… de algún modo no soporte verlos así y decidí interponerme – ¡Basta!, no permitiré que sigan con esto… por favor, ellos también sufren… son humanos como nosotros –

Mi dueño simplemente soltó un sonido de fastidio y me apunto con el control – ya veo estas tratando de ser la buena, chica me temo que en este mundo ya no existen héroes… además sabes bien que ellos te odian ¿por qué esa rebeldía tan repentina entonces arañita? – era como si todos fueran inhumanos… nadie más los defendió,

Sabiendo esto solamente lo mire con miedo y repulsión – …  ¡No puedo permitir que esto siga!,  quizá no existan los héroes, pero al menos mientras yo este viva seré uno… – sentí un shock eléctrico y caí al piso mientras trataba de arrancarme el collar y gritaba de dolor … ni siquiera aquel en el que confiaba se atrevió a intervenir

Pude ver decepción en su rostro – querida no deseaba castigarte, sin embargo no me dejas alternativa… conoces la situación y aun así buscas una redención inexistente, eres demasiado ingenua todavía… y por eso sigues aquí a mi merced desearía que fueras como Ali… – a cada momento su voz se volvía mas lejana… luego apago el control y caí totalmente inconsciente, la oscuridad comenzó a rodearme, aunque está vez me sentía tranquila… era como si no importara el dejar a mi única familia, el pasado mismo parecía desvanecerse … sin dolor al fin sentía libertad…

Desafortunadamente está no duró ya que rápidamente fui sacada de la oscuridad por una tenue voz – vuelve – simplemente negué aún sumida en las sombras cuando volvió a sonar aquel murmullo en medio de mi oscuridad – regresa –

Suspiré cansada – ¿A dónde? – Mencioné suavemente sin abrir los ojos

La voz se volvía molesta – debes volver al mundo real –

Apenas era capaz de hablar – es seguro aquí –

Al fin reconocí la voz – ¡Es una prisión! – nuevamente me deje perder – aún existen quienes te aprecian por favor vuelve –

En ese momento reaccione viendo de modo borroso dos siluetas ante mi – ¿Dónde estoy? – me sentía perdida… era casi como si hubiese olvidado este sitio

Sentí un cálido abrazo – ¡Cielos chica! Se que jure odiarte… pero mentí por favor vive por los que quedamos para ti –

Me sentía débil a más no poder – vivir es doloroso señora Lotto – en ese momento mi amo entro y me alejo a rastras de aquellas personas, sin embargo estaba tan agotada que me quedé inconsciente a medio camino… por primera vez tenía un sueño tranquilo… sin guerra… sin túneles… sin muerte…

Al abrir mis ojos estaba en un pequeño prado rodeada por mariposas – hola pequeñas – sonreí tontamente mientras sentía el suave césped bajo mi ser – este lugar es tan lindo –

Percibí como la luz disminuyó sobre mi – Hola Alison –

Al escuchar aquel nombre me puse en pie – no soy Alison… mi nombre era Artemisa – reí mientras miraba a la mujer frente a mi – eres la primera en no llamarme B12 o Artemisa –

Su mirada pareció llenarse de lágrimas y me abrazo – mi niña lo siento tanto por todo lo que pasaste –

Le aparte – no es tu culpa yo misma lo forje –

En ese momento otra voz me nombró – ¿Artemisa? – al mirar a quien hablaba sonreí tranquila mientras me acercaba – lo siento mucho, pero ahora estarás a salvó … lo prometo –

Suspiré agotada y detuve mi andar – esto es solo un extraño mal sueño… tú estás muerta y a ella no la conozco, además no puedo estar muriendo debo salvar a los otros – en ese momento un extraño dolor me invadió

Se podían escuchar voces lejanas – sigue perdiendo el pulso... ¡Desfibrilador! – en ese momento sentí una descarga eléctrica aún más dolorosa y desperté llorando y gritando – al fin regresas arañita –

En ese momento frene mi llanto y volví a mostrar un gesto agresivo– Tú ¿Por qué lo haces? – ni siquiera me levanté – déjame en paz… todos los tuyos solo me ven como un experimento a concluir – comencé a llorar nuevamente y todos se fueron lentamente … de nuevo dolía incluso esa dulce oscuridad se volvió perversa, no entiendo la causa de este dolor, lentamente me perdí en el silencio de la noche… casi anhelando rozar la muerte… tras unos minutos regrese a mi habitación dónde dejé que mi cuerpo callera rendido tras lo ocurrido ese día

Al día siguiente fui a ayudar a los oficiales, aunque algo era diferente… su modo de actuar conmigo era mas blando de lo que ya podía ser … casi se sentía como lastima

Me acerque a curar sus heridas, cambiar sus vendajes y entonces el oficial hablo – se que no debería importarme, pero quiero saber ¿por qué te quedas aquí? Vamos tu puedes huir… ser libre –

Solo lo mire – no puedes entenderlo, yo no tengo opción… mientras tenga este collar seguiré atrapada – termine de limpiar sus heridas – no puedo huir de aquí por mas que lo desee … pues de hacerlo me encontraran y castigaran, supongo que es mi culpa por desobedecer – el simplemente desvió la mirada – sea más cuidadoso … debo ir a checar a su esposa – me retire de esa habitación

Al llegar a dónde ella se encontraba recibí un abrazo demasiado fuerte – por favor no nos dejes solos –

Simplemente la aleje y sonreí al tiempo que dejaba huir un suspiro – Lotto querida no es tan fácil como lo parece –

Me interrumpió – pero tú puedes liberarnos…. ¿Verdad? O al menos ¿Puedes liberarte?  –

Suavemente desvanecí mi sonrisa mientras me sentaba frente a la puerta – no puedo hacerlo… soy prisionera como ustedes y en ambos casos es mi culpa –

Aquella herida mujer me abrazo nuevamente, aunque ahora se sentía un tacto protector – no es tu culpa… todos rompimos las reglas de algún modo por seguir nuestros ideales pequeña –

La aparte  rápidamente no planeaba llorar frente a nadie  – yo no tengo nada para seguir, solo soy una herramienta de guerra, aunque quizá los protegí por nostalgia –

Su mirada confusa me molesto – pero chica… tu te revelaste al venir aquí a ayudarnos y al defendernos –

Sonreí molesta por un breve instante, para luego tocar mi collar – te contare un secreto… para este punto ya no distingo mis emociones ¿miedo o dolor?, no importan… solo son impedimentos para mi plan – percibí su mirada cubierta en miedo y asombro, así como acompañada de un tembloroso cuerpo – los ayude, si y tengo consecuencias nuevamente – acaricie mi herido cuello – cada vez que toco mis heridas … puedo recordar cierto suceso una y otra vez –

Al parecer noto mi cambio de actitud pues la ex oficial mostro interés – oh ¿de verdad? Y bueno ¿me lo podrías contar? –

Me moleste… pero luego la mire a los ojos – bien te diré si prometes no matar a mi creadora ¿Vale? – creí que no accedería, sin embargo el asintió y me ofreció la mano – sin contacto, esta bien te lo contare … yo era una niña en aquel entonces… durante esa ocasión intente huir, pero ella me llevo a su habitación… y justo cuando creí que la situación no podía empeorar – suspire algo temerosa mientras recordaba – me apreso en la cama y empezó a tocar mis heridas de modo extraño… incluso me dijo que yo debía verme y menciono detalles sobre su extraño deseo, le suplique que parara… parecía molesta… creí que me golpearía, mas en cambio se disculpo y huyo por un tiempo… de allí empezaron a ocurrir ciertas cosas, normalmente me pedía besar sus labios de un modo incomodo para mi a cambio de ayudar a los pacientes, mientras después de mi recaptura no le importaban mis suplicas tomaba lo que anhelaba por la fuerza constantemente… llego al punto de abusar en grados extremos de mi en aquel entonces… sin darme oportunidad a defenderme – lagrimas cayeron por mis mejillas casi formando pequeños ríos – aun no entendía que estaba haciéndome  y ahora que lo comprendo siento cierto rencor y dolor recorrerme – mi tono se volvió serio – pero no dejare que nadie mas la mate ella es mi presa… solamente mi presa, pueden tomar a cualquier otro de los cuervos dorados exceptuando a ella –

Sentí como su mirada estaba cargada de miedo y tristeza mientras yo salía de aquel cuarto