ALEXANDER ES UN REY

En eso algo dijo el chofer en un idioma raro

—Ya llegamos a la dirección que nos dieron

Abrieron la puerta y si era una de las discoteca más elegantes de Quito, Alexander otra vez hablo un idioma raro y el chofer se fue con el auto.

Al llegar a la puerta Alexander se acerco al enorme guardia dijo algo y éste abrió la puerta e ingresaron todos, dentro les dieron una mesa, les pusieron un vino carisimo y tequila para los jóvenes.

—Alexander, ¿como saben que toma usted?, ni siquiera han venido a preguntar

—Magia querida Martha, ¡no lo olvide!

—Oh, jeje,

Bailo Anthony con Martha la primera canción, después pusieron una de Michael Jackson y Alexander saco a bailar a Martha, cuando empezó la canción de Billie Jean, hizo los pasos del Moonwalk perfecto, la gente hizo un ruedo viéndolos bailar, era como ver a Michael Jackson, Anthony estaba con la boca abierta, al terminar los aplausos fueron a rabiar, Alexander le sonreía a Martha

—Alexander me a dejado asombrado, yo pensé que usted más bailaba clásicas o Romanticas, pero baila igualito que Michael Jackson

—De todo se debe aprender en la vida y cuando el tiempo esta a favor nuestro hay que aprovechar aprendiendo todo lo que se pueda.

Ya habían estado ahí como dos horas y paso que un hombre trato de propasarse con Martha, Anthony estaba bailando y no se dio cuenta, en cambio Alexander salía del baño secándose las manos y lo vio, a toda velocidad se lo quito de enfrente, lo metio a los baños de hombres y ahí se teletransportó afuera donde no había nadie, lo golpeo y le succiono toda la sangre, lo desaparecio, regreso a la mesa y vio a Martha asustada

—¿Que paso?, había un hombre que me estaba molestando, vi una ráfaga negra y se desapareció ese hombre

—No se preocupe, ¡ya no la molestara más!

—¿Y como sabe eso Alexander?

—Por que yo me lo lleve y lo deje afuera, no sin antes golpearlo para que aprenda a respetar.

—Pero yo vi una ráfaga negra, ¿era usted Alexander?

—Si fui yo

—Pero eso es sobrenatural

—Martha, ya me conocerá más adelante, mientras bailemos que a eso venimos a divertirnos

Le dio la mano y bailaron una salsa que Martha miraba que lo hacia como todo un experto

—Guau, ¡Alexander baila muy bien!

—¡Que envidia Alexander!, yo no puedo me caigo a cada rato —dijo Anthony, justo se tropezó y cayo haciendo reir a su acompañante

Ya se hizo tarde y tenían que regresar, su padre los llamo y le dijeron que ya regresaban a casa, al salir de la discoteca, asomo el auto Jaguar negro de Alexander con su chofer y dijo

—¿Donde viven?, para ir a dejarlos

Le dijeron la dirección, le hablo de nuevo en un idioma raro al chofer y se fueron

—Disculpe Alexander, ¿que idioma es ese que le habla al chofer?

—Ah es rumano

—Ah cierto, usted es de allá

—Me divertí como nunca, que bueno que me tropecé con usted Martha mi viaje a sido todo un éxito, ustedes son las persona mas divertidas que he conocido

Llegaron a la casa de los chicos, en la ciudadela el guardián al ver el auto lujoso abrió la cerca, llegaron a la casa a la entrada y sono el claxon

Se vio que salieron dos personas, pero el hombre estaba enojado

—¡¿Estas son horas de regresar a la casa?!

Alexander salio del auto y el padre de los chicos vio que era un hombre muy alto, elegante y el auto era uno lujoso

—Buenas Noches, soy Alexander Collins

Se acerco le dio la mano y le pidió que pase a su casa entraron todos,los chicos miraban a sus padres cabizbajos.

—Queria pedirles perdón por la tardanza de los jóvenes, yo tuve la culpa, les pedí que me enseñaran lugares para divertirse y fuimos, pero el tiempo se nos vino encima y ellos me habían dicho que tenían permiso hasta cierta hora, pero yo insistí quedarnos, así que les pido una disculpa.

El padre de Martha miraba a Alexander le inspiraba respeto, se escuchaba muy caballeroso

—Oh no hay problema, es que siempre les he enseñado a ser cumplidos y responsables

—Muy bien, eso dice mucho de su persona, yo soy muy responsable desde niño mi padre fue muy drástico conmigo, recién ahora salgo a visitar países y a divertirme, primero tenia la responsabilidad de regir el país de donde vengo, ahora puedo dejar a mi padre a cargo cuando salgo.

—¿Regir un país?, ¿usted rige un país?

—Sí, ¡soy el Rey de Transylvania!

Martha y Anthony casi se caen de las silla donde estaban sentados, ¿estuvieron junto a un rey todo este tiempo y no lo sabían?

—Si, es cierto, ya me acuerdo lo entrevistaron cuando llego al País y dijeron que le gusta mucho la privacidad, ¿pero como conoció a mis hijos?

—Ah es una anécdota, estaba en el mall y unos jóvenes venían corriendo, empujaron a su hija en las escaleras eléctricas y ella casi cae, la alcance a salvarla y así empezó todo

—Alexander usted es el rey de Transylvania, usted es un rey, pero no nos dijo nada de eso

—No me gusta estar fanfarroneando sobre eso. Y ahora le pido que les de permiso, porque ellos me están llevando a conocer esta linda ciudad

—Claro que si su majestad, no hay ningún problema

—Bien, entonces ya están en casa, mañana igualmente me llaman para ir donde lo seleccionen, además ahora que conozco su casa vendría a buscarlos aquí

—Esta bien majestad

—Solo díganme Alexander, ¡Adios!

Salio subió al auto y se fue.

Los padres los miraron le sonrieron,

—Un Rey, es un rey, jajaja en compañía de un rey, parece mentira

Martha se quedo perpleja, Alexander un rey, con razón caballeroso, respetuoso y la venia que vio

Alexander llego al Hotel para descansar a pesar que al llegar entro, pero salio volando por la ventana en forma de murciélago y se fue a una parte oscura que olia mal, se transformo se escondio en las penumbras, venia corriendo un joven con una cartera, se metió a ese callejón pensando en ocultarse, estaba atrás de una cosa grande de metal, vio que los policías pasaron de largo y sonrió, abrió la cartera había billetes de baja denominación y documentos personales, sintió un ruido y se regreso a mirar, no vio a nadie, siguió revisando el bolso

—Robar no es bueno

—¿Quien es?, ¿donde esta? —lo dijo blandiendo un cuchillo el joven

De la penumbra salio un hombre vestido de negro muy alto, lo miraba con unos ojos rojos, el joven se levanto y comenzó a caminar hacia ÉL, lo tomo del cuello, le clavo sus colmillos y le succiono la sangre, tomo lo que necesitaba, le lamio la herida y quedo como si nada, lo cogio y lo dejo afuera en la banqueta con el bolso y se fue, más tarde los policías lo vieron y lo arrestaron al joven que estaba como ido.

Alexander regreso al hotel satisfecho de alimentarse, se aseo y se acostó a ver las noticias sonriendo, después de un momento, cerro sus ojos y los movia mucho y finalmente sonrió, se hizo una bruma escarlata y se fue.

En casa de Martha ya se habian acostado todos, Martha se había quedado dormida leyendo el libro de Romeo y Julieta, sintió algo abrió los ojos, vio a Alexander como si fuera un fantasma, volvió a acercársele a su cara y empezó a besarle muy despacio sus labios, con sus manos a acariciarle su cuerpo, bajo a desabrocharle los botones del pijama y dejo expuestos sus pechos, se los lamio muy despacio, Martha jamás había sentido esto, sentía un placer jamas imaginado, mientras Alexander se los chupaba despacio le pasaba su lengua alrededor de las aureolas haciéndola dar unos pequeños saltitos de placer, sonrió mirándola y la volvió a besar, esta vez metiéndole la lengua y jugar dentro de su boca le cogio sus manos y se le acostó encima diciéndole

—Martha te amo y tu me amas

Le dio otro beso en los labios y se fue.

Martha abrió los ojos, no había nadie, se sintió sudorosa y estaba sudando, le llego el perfume de Alexander, se extraño de lo que estaba pasando ,y su pijama estaba desabotonado, se quedo pensando en que fue solo un sueño, pero ¿porque con Alexander?, ¿por qué?

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