2. Pasado y segundo encuentro.

Mattew Johns

103 AÑOS ANTES

Nunca olvidaré lo que mi padre me hizo, él pensó que era mejor vivir sin una compañera destinada por siempre sólo por sus malditas predicciones que lo hicieron volverse loco.

Predijo que mi compañera no me iba a aceptar, tal cual como mi madre que después de darme a luz se fue y nunca regreso. Él dijo que ella sólo necesitaba tiempo, siempre me dijo lo mismo, pero ahora comprendo que no lo aceptó, que después de nacer yo, él le contó la verdad de su naturaleza y ella decidió romper la Unión, vi como mi padre se fue debilitando cada día más hasta ahora no poder pararse sólo.

Cuando cumplí 20 años tuve que hacerme cargo de la manada porque habíamos recibido muchos ataques por otros que sabían que en está manada había un alpha débil, eramos un punto de atención para todos.

Sé que será difícil para mí encontrar a mi mate ahora, pero tal vez más adelante, todo haya cambiado. Tal vez el destino que tantos dicen que existe, haga poner en mi camino a esa chica y estoy seguro que no la dejaré ir.

EN LA ACTUALIDAD...

Podía sentir que ella era diferente, puedo percibir que está nerviosa, mira a todo su alrededor mientras bailamos y yo decido también mirar, todos en el lugar nos miran y parece que le incómoda ser el centro de atención.

Yo por mi lado ya me acostumbré a eso, pero parece que para ella no es lo mismo, agacha su mirada a cada momento lo que por alguna razón me hace enojar, no quiero que piensen qué le estoy prestando atención a alguien que es tan débil.

- Aquí acaba todo, ya te puedes ir- digo alejándome de ella.

Ella me mira y puedo ver la confusión en sus ojos que me hace sentir incómodo.

Camina rápidamente donde su amiga donde intercambian un par de palabras, su amiga y ella me dan una última mirada y luego las dos salen del local sin mirar atrás.

Iba a seguir bailando con Kimberly, pero mi mirada va una y otra vez a la puerta con la esperanza que aquella chica que llamo mi atención hace un momento regrese, pero no hubo resultado.

Camino hacia Alex, mi beta y mi mano derecha de entre todos en la manada.

- Persigue a dos humanas que se acaban de ir - le ordeno y regreso a la fiesta.

Después de 30 minutos siento que mi celular vibra en mi bolsillo así que contesto.

-Le tengo una noticia, pero no sé si te gustará del todo -dice con cierto temor.

-Habla - digo con poca paciencia.

-Ellas... están en la discoteca Blue de Jason, señor. - las venas en mi brazo se marcan al cerrar mi mano en un puño.

-Voy para allá - cuelgo y sin mirar o hacer caso a alguien salgo, enciendo mi auto y conduzco todo el camino.

Quince largos minutos he demorado en llegar a este asqueroso lugar que juré no volver a pisar después de lo que paso.

Miro que hay una cola pequeña afuera para entrar así que decido esperar antes de hacerme notar. Persona tras persona va entrando hasta que llega por fin mi turno, el vigilante me mira y después de abrir las varillas se hace a un lado dejando que pase.

Entro en el local donde el olor a whisky barato se hace notar junto con marihuana.

Trato de hallar el aroma de aquella chica, pero no tengo suerte. Doy vueltas por todo el lugar hasta estar en el centro de la pista dónde la veo bailando y meneando sus caderas de un lado al otro.

Algo en ella me causa curiosidad,  sigilosamente me acerco a donde está y trato de alejar a los chicos que la rodean con tal descaro.

Sus manos se posan en mi pecho y va bajando haciendo un baile que me hace olvidar del lugar donde estamos.

-¿Qué haces?-le pregunto cuando veo que su mano intenta lentamente de quitar los botones de mi camisa, puedo oler el alcohol en ella sin disimulo -¿Qué tanto has tomado en 50 minutos que no estuve?-pregunto con un poco de molestia.

-A ti te conozco -dice con picardía ebria.

-No lo creo -respondo esquivando su confusa mirada.

-Como sea guapo, ¿Por qué mejor no nos divertimos?-pregunta poniendo su mano en mi cuello, trato de alejarme, pero ella logra poner fuerza suficiente para acercarme y sin aviso alguno posar sus labios encima de los míos.

Después de unos segundos dejo de poner resistencia, no me muevo más, lo único que está en mi mente es que estoy embriagado por un olor tan exquisito que me hace perder la cordura. Sus labios se mueven junto con los míos en una danza increíble, meto un poco mi lengua pidiendo permiso y ella no se resiste, así que aprovecho en hacer un pequeño recorrido por su boca disfrutando de ella.

Me alejo un poco para poder respirar y ella hace lo mismo, pero antes de darle escapatoria me quito mi saco y lo pongo debajo de su cintura cubriendola, la subo a mi hombro y salgo del lugar junto con ella mientras trata una y otra vez de bajar, cuando estamos afuera, el frío me llega en el rostro lo que me hace pensar un poco más.

La bajo lentamente y levanto mi saco para ponérselo para evitar que se enferme, ella sólo me mira y sonríe.

-¿Ya se te pasó la borrachera?-pregunto divertido.

-No del todo -responde de igual forma -quiero hacer algo está noche -dice de manera sensual, sonríe de manera coqueta e intenta acercarse a mi lo cual me hace reír.

-Oh no, eso no -digo esquivando su cuerpo.

-¿Por qué?-pregunta deteniendo sus movimientos.

-No puedo -digo recordando que había un aviso que hoy como cada mes habrá eclipse y tengo que regresar con Kimberly.

-Entiendo, iré por uno de esos chicos, seguro que uno de ellos querrá -dice como si nada comenzando a caminar hacia la puerta.

-Debes estar bromeando - dudo que en verdad haga eso, pero igual agarro su brazo haciendo que se detenga.

-¿Por qué? Soy mayor de edad - añade con una sonrisa.

-¿Y eso qué? No puedes estar con nadie - digo en un ataque de irá al oírla decir tal cosa.

-Guapo tu beso hizo esto, además tengo que perder mi virginidad, ¿Qué mejor manera que esta?-pregunta poniendo sus manos a la altura de su cabeza.

Oír su confesión me sorprendió, no esperaba que alguien que lo quería hacer tan libremente sea virgen, admito que escucharla me excito, tanto que tengo ganas de ahora mismo llevarla conmigo, pero la poca cordura que me queda dice que eso no estaría bien.

-Adiós guapo -dice haciendo que vuelva en sí.

-No te vayas -pido sosteniendo su brazo con un poco más de fuerza.

-Tic toc, tic toc, tic toc- comienza burlándose.

-Esto es una locura - comienza a decir mi lobo tratando de hacerme cambiar de opinión.

-No te metas en esto - respondo molesto.

-Ibas a escoger a Kimberly para reemplazar a nuestra luna, ¿Por qué haces esto con una humana?- gruñe enojado.

-No es tu puto problema - le digo nuevamente y corto la conexión entre ambos.

-¿Qué pasa?-pregunta ella un poco sobria -¿Te arrepentiste?-pregunta divertida -Si es así no es necesario que sea contigo, no quiero parecer como si te estuviera obligando a hacerlo -añade con gracia.

Retrocede unos pasos soltando el agarre que yo aún tenía en su brazo.

Ese movimiento por alguna razón me molesta, pero no dejo que se note.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo