Por fin.

Después de dos horrorosos días en "mi celda ", mi madre ha venido por mí, pero al instante me preocupo porque no vi a mi lobita con ella.

-¿Dónde está mi mate, mamá?-le pregunto.

-No te preocupes, está bien, la dejé con tu nana porque tal parece que no le agrado - me contesta con cierto humor.

Como espera que le agrade, después de que haya encerrado a su mate a pocos minutos de conocerla - y ahí está Dylan con sus comentarios.

"Mira guárdate tus comentarios"

Cierro el link porque estoy convencido de que le será más fácil tomar el control para poder hacerle saber sus opiniones a mi madre y la verdad no quiero más días en mi " celda".

-Tengo que verla, ¿Dónde está mi nana?- le preguntó a mi madre en lo que caminamos hacia la casa ya que las celdas están en un edificio en el bosque.

-Están en tu cuarto, tu aroma es lo único que la tranquiliza, parece que va hacer una buena mate - el tono que utiliza me asombra, lo dijo con orgullo y mi madre no se expresa de esa manera con otras personas que no sean de su familia, no después de que mi hermano se convirtió en rogué.

Me despido de ella con un beso y me dirijo a la casa donde esta mi pequeña mate.

Al entrar a mi cuarto me encuentro con mi nana y mate jugando, mi nana es una mujer de unos 300 años pero aparenta 40, tiene el cabello castaño ya con varias canas, sus ojos cafés ven a mi niña riendo con cariño y respeto ya que ella será su Luna cuando tenga 16 años.

La primera en darse cuenta de mi presencia es mi mate y lo siguiente que hizo me dejó anonado.

-Bidan- dijo o bueno intento decir el nombre de mi lobo al mismo tiempo que alzo sus pequeñas manos.

"¿Cree que la voy a perdonar? No después de olvidarse de nosotros por una galletas"

Y como si lo hubiera escuchado se puso a llorar y eso hizo que Dylan tomará control de mi cuerpo.

-Perdón mi niña, no quise decir eso - dijo arrepentido mientras caminaba hacia ella y la tomaba en brazos.

-¿Me perdonas mi lobita? - pregunta dándole un beso en su cachete.

Así o más sumiso - le digo burlándome de él a lo que sólo me responde con un gruñido.

-Dylan, ¿Dónde andaban tú y Blake, para dejar sola a su mate? - y ahí Dylan encontró su venganza contra Arlette ya que nana odia que mi madre nos encierre.

Dylan no lo hagas.

Estabas burlándote de mi ¿no?

Y cerró el link.

-Nana, no fue por que quisiéramos sino porque Arlette y Amy nos volvieron a encerrar durante dos días sabiendo que habíamos encontrado a nuestra mate - dijo inocentemente tratando de que nana se enojara y desgraciadamente para mi madre lo logró ya que sale enfurecida de la habitación.

-bidan mentidoso- balbucea mi mate.

-Quieres a este mentiroso, lobita - dice arrogantemente mientras la pone en medio de nuestra cama y nos recostamos a lado suyo.

¿Cómo es que te conoce?- pregunto sorprendido

Dios Blake, ¿No aprendiste nada entre todos tus estudios?- responde indignado.

No porque a mi parecer anduvimos acostándonos con cualquiera que tuviera falda.

Tú te acostaste con todas las mujeres que tuvieras enfrente, yo jamás quise eso, si por mi hubiera sido aún seguiría virgen para mi lobita pero olvidemos eso, nuestra mate me puede conocer por que no es cualquier loba- aún sigue enojado por eso.

¿A qué te refieres?

A que al igual que tu, ella fue elegida para portar a uno de los primeros lobos, en tu caso te tocó a mí y en su caso le tocó a mí amada, pronto la conocerás, sólo hay que esperar a que se presente.

Y ¿Cuándo será eso?- pregunto aún impresionado, he convivido con el por casi 150 años y no sabía que fuera de los primeros espíritus lobo en existir.

Ya está empezando a hablar bien, lo que es más rápido de lo normal en los niños lobo así que sólo es cuestión de días.

-¿bek donde está?- pregunto mi niña

-está en otro lado mi niña, ¿quieres que regrese?- contesta Dylan

-Si- le responde emocionada.

Me devolvió el control.

-Hola mi niña- digo feliz porque aunque somos uno no me siento así cuando le habla Dylan a través de mi.

-Hola bek- respondió con una sonrisa.

-Blake se dice Blake - la corrijo dulcemente.

Hace unas muecas raras antes de decir mi nombre bien y jamás en la vida podré sentirme así de feliz cuando alguien dice mi nombre.

-¿Blake y bidan? - me pregunta mientras gatea hacia mí y la pongo en mi regazo.

-Blake y Dylan

-Blake y Dylan - repite después de mí y me sorprende que hable así de bien, pero por lo que me dijo Dylan es normal en ella.

-Exacto hermosa- le respondo mientras le doy un beso en su mejilla.

-¿y yo? - y esa es una buena pregunta ya que no se su nombre, solo estaba ella en la cesta, no había una carta o algún rastro que me llevara a quien la abandono o dejo ahí.

-No se preciosa, que te parece Mery? - le preguntó intentando encontrar un nombre que le guste.

-No - responde arrugando un poco si nariz causándome una risa.

-Karla?

-nop

-Miriam?

-No

Dylan ya no se que mas nombres

- Mackenzie?- le preguntó por mi

Tal parece que ese le agradó por que nos regaló una gran sonrisa mientras asentía.

-Entonces hermosa, tú eres Mackenzie- le digo mientras sonrió

-y Hannah

-¿Quieres dos nombres?- pregunto confundido al escucharla decir otro nombre.

-No, la voz en mi cabeza se llama así -dice mientras señala su cabeza.

-¿Qué?

Hola Blake

¿Quién eres tú? - le preguntó a la voz en mi cabeza

Soy Hannah, la loba de Mack.

Y ahí es cuando la palabra asombrado queda corta.

-¿Qué rayos? - exclamó causando la risa de mi mate