Shane byung yoen

Había estado caminando de un lado a otro durante todo el día, Cómo si eso fuera poco también tenía que proteger y mentir sobre la ubicación de mi hermano, ya habían pasado 5 días desde que se marchó como si nada; oh hermano, sin duda me debes una grande!.

—Shane

Voltie mi mirada sólo para hacer una leve reverencia en forma de respeto, era el jefe kim, y como siempre sólo venía a preguntar sobre mi hermano.

—¿sabes algo de tu hermano? —pregunto

—no señor, desafortunadamente, no me dijo adonde iba a ahora—Realmente no creía nada, pero tratándose de "byung yoen" era esencial protegerlo y apoyarlo en todo, al menos ese es el juramento que le dije a papá cuándo tenía 5 años

—shane, entiendo que es tu hermano, pero no puedes hacer sus deberes para que él se vaya a divertir, en cuanto regrese hablaré seriamente con el —dijo mientras se iba

Un suspiro por mi parte salió, pude relajar mis hombros aunque sea un momento, sabía que mi hermano no se quedaría quieto, ese terco siempre hace lo que se le da la gana; si esta noche el no regresaba a casa, tendría que ir a buscarlo por la mañana. Apenas di un paso alejándome de la barda dónde anteriormente mi hermano bajo por esa flor, Cuando escuché un ruido, pensaba que sólo era mi imaginación hasta que lo volví a escuchar, "psst", "psst", se escuchaba una y otra vez. Me acerque a la barda y miré hacía abajo pero no había nadie, no hasta que lo escuché con claridad.

—shane, por aquí—me susurró el, estaba oculto en una de las ramas de un árbol que estaba ahí enfrente —baja, tengo que hablar contigo—me volvió a repetir en el mismo tono mientras señalaba abajo del árbol

No había dicho nada porque mi mente estaba procesando la información, pero luego fruncí el ceño mientras me daba la vuelta y me alejaba de ahí, después de irse como si nada ¿Quiere hablar?, No!, No quiero nada que ver con sus problemas. Sin embargo un golpe en seco se escuchó, por lo que me di la vuelta, mi hermano se estaba sacudiendo la ropa mientras se acercaba a mí rápidamente.

—te dije que bajarás— me dijo el un tanto molesto—¿Que?,— me preguntó algo confundido, yo me quedé callado, y seguí con mi camino mientras él me seguía en silencio, sabía perfectamente bien que estaba molesto con el y no le hablaría hasta mañana.

De cualquier forma nos fuimos a la casa donde nos quedabamos, una vez que entré dejé mi sable en el lugar de siempre, en una pequeña esquina que estaba entre la pared y mi catre. Estaba tan molesto que no recuerdo que fue lo que hice, anoche, para cuando desperté ya había amanecido; giré a mi izquierda y la cama de mi hermano nuevamente estaba vacía, un suspiro bastó para que me levantará y me preparará. Cuando salí de la cabaña pude ver al jefe kim hablando con mi consanguíneo, me bastó con ver su rostro para darme cuenta que lo estaban regañando, una vez que esté se fue mi camarada me miró para después acercarse lentamente con la cabeza agachada

—lo siento—me dijo el aún con la cabeza abajo

—¿Y que?... ¿Crees que con eso es suficiente?—lo mire seriamente a lo que él sólo negó, di un suspiro profundo—mira byung yoen, no soy tu enemigo, ni un espía, soy tu hermano... Tienes que confíar en mí ¿Quedó claro?

Vi como me miraba sorprendido al parecer había pensado que no podía confiar en mí, ¡la traición, la decepción hermano!. Ahora ambos estábamos sentados en el tejado de la casa mirando hacia el horizonte, estaba sorprendido por todo lo que me había contado, sin embargo ahora dudaba de quien era realmente el asesino del clan kim.

—¿Encerio si era ella?—le pregunté un tanto dudoso a lo que asintió mientras afirmaba mi pregunta—increíble, todo este tiempo creí que ella estaba muerta, ¿Pero como?

—no lo sé, eso nunca se lo pregunté—dijo el

—Idiota—le comenté un tanto decepcionado y molesto a la vez

—bien ya que te conté todo, promete que no dirás nada... Ni siquiera al jefe kim—me dijo mientras se levantaba y me miraba

—lo prometo—dije mientras lo miraba atentamente

El asintió y bajo del techo de un brinco para después caminar hacia otro camino que daba al palacio, yo sólo me quedé ahí sentado contemplando la vista

(.....)

La lluvia comenzó a caer con fuerza por todos lados, provocando que algunos de los patios tuvieran charcos de agua causados por la lluvia, mi pie piso uno mientras corría de nuevo hacia la cabaña. Me quedé en la entrada viendo como mi consanguíneo corría igual hacia donde me encontraba, ambos nos miramos y soltamos una risa para después entrar.

—¿Me pasas la toalla? —dijo el

—Ten—le aventé una mientras me estaba quitando la polera

Sin embargo nos detuvimos al escuchar un ruido en la parte de atrás, seré más específico de ¿acuerdo?; la casa dónde nos quedamos era más utilizada como una bodega antes, está dividida en dos secciones, la parte principal, donde estan las camas, los roperos y baúles. En fin todas nuestras pertenencias en otras palabras es donde nosotros nos encontramos, la casa es grande así que hay un muro que divide está; exactamente dónde yo estoy con cara de idiota viendo hacia el otro lado, no hay nada sólo estantes con cajas llenas de no sé que, y uno que otros baúles, aunque también se encuentra la puerta trasera para salír por la parte de atrás como lo hizo mi hermano. Para poder entrar ahí tienes que entrar por la puerta que está enfrente de mí, ah es verdad, esa puerta también está del otro lado, la rompimos cuando estábamos jugando a las peleas. Si, si fue muy trajico, la pobre puerta en el suelo, mi hermano y yo con cara de idiotas, nadie lo habría sabido pero nuestra suerte dijo "hey qué tal!, Aquí les traigo al primer ministro y al jefe kim", bueno esa es otra historia, estaba mirando la otra entrada mientras traía mi polera en las manos, pude ver cómo mi hermano se asomaba por el marco intentando ver, pero sorpresa, sorpresa no se veía nada sólo la oscuridad que se encontraba ahi

—¿Ves algo?—le pregunté

—No... Creo que solo fue una rama que chocó con el techo —decia mientras me miraba, sin embargo dio un brinco y un grito al escuchar como una caja se caía eh intentaban abrirla

—¿decias?—le dije con burla mientras el sólo me miraba con molestía

Caminé hacia el marco con una lámpara, todo estaba oscuro y sólo se podía distinguir algunas cosas, debo aclarar que la lámpara no ayudaba mucho también.

—no veo nada —dijo el mientras yo seguía caminando por la habitación

—si una buena iluminación no le haría mal

Ambos nos detuvimos para luego iluminar donde habíamos escuchado la voz de una chica.

—¿Sun-hee? —dijo mi hermano sorprendido, yo lo mire igual para luego ver a la chica

Traía un sombrero de mimbre, y un traje negro, si no mal recuerdo ese es el traje antiguo del clan kim, ella se quitó el sombrero el cual estaba escurriendo de agua, la observé de pies a cabeza, realmente el negro le resaltaba bastante la figura que tenía.

—¿Qué haces aquí?— mi consanguíneo sonaba algo molesto, por lo que volte a verlo confundido

—ah si, lo lamento, pero necesitaba un refugio antes de seguir mi misión, no contaba con que fuera a llover—comento mientras miraba a mi hermano

Yo estaba ahí parado observando a ambos, no era de noche pero las nubes grises habían tapado el sol por completo provocando que utilizaramos lámparas, pero apesar de que sólo tenía una linterna ahí alumbrando ese cuarto oscuro, me di cuenta que podía ver claramente las expresiones de ambos, mire hacia el techo y me di cuenta que la luz del día estaba regresando.

—¿Porque te enojas? —pregunto ella confundida

—no estoy molesto —dijo el, pero Oh hermano, claro que lo estás; te conozco mejor que nadie y la verdad es que no sabes mentir

—¿Shane, byung yoen?

—mierda —susurro mi consanguíneo, los tres estábamos mirando hacia la única entrada que tenía esa habitación, nos miramos por unos momentos para que después mi hermano se asomara— Alteza —dijo el mientras salía, y hacia una leve reverencia.

Yo miré a Sun-hee y ella me miró a mi, nos quedamos ahí mientras mi camarada hablaba con el heredero, y al parecer se iba a quedar un buen rato, ya que le empezó a preguntar cómo le "había ido en el pueblo estos días". Quería apagar la luz de la linterna pero si lo hacía tal vez, se diera cuenta y preguntaría que hay aquí.

(....)

Había pasado unas cuatro horas y el príncipe aún seguía ahí platicando, yo me quedé en el mismo lugar, inmóvil con mi brazo levantado sujetando esa linterna, pero me percate que ya estaba comenzando a temblar, mire a Sun-hee que seguía ahí pero estaba observando los detalles del marco de las columnas.

—Sun —susurre, a lo que ella volteó con curiosidad, yo sólo mire mi brazo el cual seguía temblando, ella se percató a lo que comenzó a buscar algo para poder poner la linterna

Sin embargo mi brazo ya no aguanto, y la linterna se cayo, provocando un ruido agudo, mire a Sun-hee, ella me miró asustada, cómo era de esperarse el príncipe pregunto que había sido ese ruido

—Oh...¿Una lámpara?—dijo el mirando la linterna en suelo

—Ah si... Esque estaba colocándola antes de que llegara, esta parte de aquí es muy oscura cuando oscurece o se nubla —dijo mi hermano mientras miraba a todos lados, buscándonos

—Entiendo...—volvio a decir el heredero mientras se agachaba a agarrar los pedazos de aquella cosa llamada "lámpara"

—Ah dejé, yo lo hago—dijo mi camarada acercándose a el, pero el príncipe lo alejó y lo cayó con un "Shhh"

Mi consanguíneo lo miraba confundió, el heredero parecía muy concentrado agarrando aquellos pedazos mientras mi hermano seguía buscándonos con la mirada, se preguntarán, en donde estamos, bueno dado el caso que los baúles son muy pequeños, no es un buen escondite, atrás de las repisas. Muy ruidosas al moverlas, así que antes de que entrará el futuro Rey y mi hermano, logré que Sun-hee se subiera a la viga que cruzaba entre las columnas de esta parte del cuarto, en cuanto a mi intentaba subir completamente; Sun-hee me sujetaba con fuerza de mi piel desnuda de mi espalda, podía sentir sus uñas clavándose en mi tejido y un líquido caliente escurrir por ella, pero mis fuerzas se estaban acabando, podía sentir el sudor en mis manos y como empezaban a resbalar por la madera. Afortunadamente mi hermano me vio, pude ver cómo me miraba asustado, por lo que tomo los hombros del príncipe, el cual lo miro confundido.

—¿Sucede algo byung yoen?—pregunto

—Yo... Me gustaría mostrarle algo que conseguí en el pueblo —mi hermano lo levanto y lo llevo casi empujándolo al otro cuarto

Solté un pequeño suspiro de alivio, pero ahora debía de bajar con cuidado para no hacer ruido, baje de un pequeño brinco y estiré mi brazo el cual seguía temblando, lo sujete con mi mano y la mire, ella me miraba preocupada, vi que iba a bajar, pero la detuve a lo que ella se quedó ahí.

(.....)

—Bien sin duda el príncipe sospecha de mi —Decia mi camarada mientras se acostaba en su catre

—lo lamento, esto es culpa mía —dijo ella mientras hacía una leve reverencia

—Sun, ¿Porque has venido al palacio? —le pregunté, a lo que ella me miró algo sorprendida por la pregunta, mi hermano se sentó en su cama mirando con curiosidad a la chica

—oh... Esque, byung yoen dijo la otra vez que había visto un libro con el símbolo de la flor del broche en la biblioteca

Mire a mi hermano, el cual nos miraba como si no hubiera entendido nada, pero reaccióno diciendo "Ah, si ese libro".

—¿Y el libro.... Que es lo que tiene? —le dije

—el libro tiene mapas y nombres de los clanes más poderosos, ya eliminaron a cinco... El nuestro incluído, también están los nombres de los últimos sobrevivientes que se encuentran escondidos en pueblos, incluyendo familias

—¿Y qué?, Es decir, ¿Que planeas?... No vas a llegar, y decir...."ay hola, no me hagan caso sólo vine por el libro adiós" —claro que dije esto con tono de mujer, o al menos mi torpe intento de

Pasamos un buen rato hablando de un plan para recuperar ese libro, sabíamos que si lo dejábamos donde estaba, se darían cuenta que hay varios sobrevivientes del clan, incluyendo a mi hermano y a mi.

—¿Y qué plan tienes? —pregunte

—bueno, no tengo uno, esperaba a que byung yoen me ayudara a sacarlo de la biblioteca—Ella miro a mi hermano

Observaba con cuidado a mi hermano, el miraba con seriedad el suelo, conocía muy bien esa expresión, estaba pensando en un plan; si anteriormente casi lo descubren por meterse a escondidas ahora sería el doble de riesgo.

—Yo no puedo— Dijo finalmente mi hermano mirando a Sun-hee

—¿Porque? —pregunto ella curiosa

—la última vez que entré casi me descubren, y ahora es demasiado peligroso, en la mañana vi que estaba el rey junto con el primer ministro ahí, no sabemos si siguen aún en la biblioteca; y aunque no lo llegaran a estar, tampoco sabemos en qué momento pueden entrar. Si nos encuentran se acabó todo—Miraba a mi hermano con asombro, lo había dicho sin titubear, había sido claro y firmé con lo que quería decir

—Es cierto —dijo ella desanimada y sentándose en el suelo

—¿Y si le decimos al príncipe?—comente

—¿Que? —ambos me miraban fijamente confundidos y sorprendidos por mi propuesta

—pero, el no puede saber nada de —dijo mi hermano mientras nos señalaba a los tres

—Ya lo sé tonto, pero me refiero a que podemos decirle una mentira, con el podemos entrar a la biblioteca y tomar el libro

—bien, pero.... ¿Quien lo hará?, El definitivamente sospecha de mi —dijo mi hermano

—Yo —dije — le diré que me comentaste que había algo nuevo en el pueblo vecino, pero qué quiero ir por un atajo para llegar y regresar en un día, sin necesidad de que sea una semana

—me parece bien, pero.. —me dijo el alargando la letra o

—le preguntaré si conoce un atajo, dudo que diga que si, así me llevará a la biblioteca y tomaré el libro, pero te necesito cerca de ahí para que te lo lleves... En cuanto a tin Sun, tendrás que quedarte aquí, si escuchas algo escondete

—De acuerdo —dijo ella con una sonrisa

—bien, entre más rápido lo hagamos menos peligroso será —comente

Ambos salimos de la casa para después caminar hacia uno de los pasillos que daban hacia el patio principal, poco después nos detuvimos frente a una puerta, ningúno dijo algo. Sólo nos miramos y asentimos con la cabeza para después irnos por diferentes caminos, esa puerta era la de la biblioteca real, hubiera sido más fácil entrar y tomar el libro; pero teníamos que prevenir todos los riesgos posibles al entrar a ese lugar, poco después me encontré al príncipe sentado en una banca mirando hacia las montañas mientras tomaba el té, me detuve un momento y di un suspiro profundo para después acercarme lentamente a él, para que no sospechara nada.

—Alteza —dije haciendo una leve reverencia

—¿Que sucede Shane?— me miró con una sonrisa mientras palmeaba a un lado de el, me senté a su lado mientras agarraba el mango de mi espada la cual estába de pie a un lado de la banca —Dime, ¿Quieres un poco de té?

—No gracias su majestad, es sólo que quería preguntarle algo —comente mientras giraba mi cabeza para verlo, el asintió y dijo "que quieres saber", le dije todo respecto a la "nueva cosa" que había en el pueblo vecino y que me lo había dicho mi hermano, sus labios quedaron a centímetros de tocar la Porcelana de la taza. Bajo su mano dejando aquella cerámica en la mesa para luego mirarme

—Me gustaría ir contigo, pero desgraciadamente no sé si hay algún atajo, pero en la biblioteca hay varios mapas con caminos y diferentes atajos para cada pueblo —me dijo el

—¿Enserio?, Pero yo no puedo entrar ahí su alteza, lo tengo prohibido —Dije, el soltó una risa y se puso de pie para luego agarrar mi hombro

—¿Quien dijo que irás tú sólo?... Los dos iremos juntos, la biblioteca es grande y el mapa puede estar en cualquier parte de la biblioteca, vamos —dijo colocando sus brazos atrás de el mientras caminaba derecho y con una sonrisa

(.....)

—Ahm, ¿Está seguro de que no lo regañaran?—dije mientras miraba la puerta de la biblioteca, ambos ya estábamos adentro del lugar

—Ah no... Tranquilo, estás conmigo y me estás ayudando a buscar algo, no tienen porque regañarme, no estamos haciendo nada malo

Valla no encuentro fallas en su lógica, o Almenos eso diría si no intentará "Robar" un libro de aquí, me dirigí al lugar donde byung yoen me había dicho que vio el libro, pero fruncí el ceño al no ver ningún libro de color rosa con detalles dorados, mire a todas las repisas del la biblioteca y no estaba. Poco después la puerta se abrió me quedé quieto pensado en quien podría ser, pero relaje mis hombros al ver que mi hermano se asomaba con cuidado pero al verme se metió y cerró la puerta con cuidado para luego acercarse a mi.

—¿Tienes el libro? —Me dijo mientras susurraba, yo miré hacia donde estaba el príncipe, parecía muy entretenido buscando el mapa entre baúles y cajas

—No esta —le dije mientras lo miraba, el estaba sorprendido

—¿Cómo que no está? —dijo en un tono molesto pero aún en un susurro, pronto se dirigió al lugar donde estaba el libro mientras sostenía su sable

—Espera, byung yoen—le dije mientras me acercaba a el

—¿Cómo vas Shane? —dijo el príncipe, mi hermano se había colocado atrás de la columna y yo me acerque más, fingiendo que estaba buscando el mapa

—Aun no encuentro nada —dije

—Bien, sigue buscando, sé que está aquí —dijo mientras seguía ahí revisando entre los baúles y cajas

Mi hermano me pego levemente en el hombro, yo lo mire y el señaló la mesa, el libro estaba ahí, en ese momento me di una cachetada mental, había estado ahí y en ningún momento la ví, caminé hacia la mesa y lo tome. Me di la vuelta y se lo lancé a mi hermano el cual lo atrapó para luego esconderlo en su ropa sin que se notará, una vez que me miró yo le hice una seña de que se fuera, el se dirigía a la puerta, yo me volte para seguir revisando una caja que había ahí, pero entonces pasó esto.

—Asi es su majestad encontramos un libro muy peculiar en la biblioteca

Me quedé estático para voltear con rapidez, el rey y el primer ministro me miraron confundidos, yo hice una reverencia pero.

—¿Qué haces tú aquí?—dijo el primer ministro alzando su voz

—El está conmigo, primer ministro—dijo el príncipe colocándose a un lado de mi—me está ayudando a buscar algo que necesito para mis estudios, no tiene porqué ser grosero con el, gracias a él usted sigue con vida. O ¿Ya lo olvidó?

—¡Principe Han! —dijo el Rey

—lo siento padre, esque creo que no debería ser grosero si no sabe los motivos por los que el está aquí, en fin, Shane, por favor sigue buscando el libro que te pedí —el heredero se dió la vuelta para seguir buscando, a lo que yo hice lo mismo

Estába revisando los estantes, buscando un libro que ni se cual era, mire a mi lado derecho y byung yoen aún se encontraba en la biblioteca, estaba agachado cubriendose en unas cajas para que no lo vieran, era verdad, cuando se abrió la puerta era lógico que mi hermano se iba a esconder, mire a mi otro lado y el ministro parecía buscar algo mientras el rey estaba hablando con el príncipe. Yo volví a "seguir buscando el libro" para que no sospecharan nada hasta que.

—mis disculpas su Majestad, pero quiero preguntarle algo —le dijo el primer ministro al heredero, yo seguía haciendo lo mismo mientras miraba de reojo a mi hermano, ambos estabamos asustados, si nos descubrían ambos seríamos ejecutados

—No en lo absoluto —dijo el futuro Rey— oye Shane —cerré mis ojos para después abrirlos y mirarlo, mientras estaba incado buscando entre esos libros.

—¿tu viste si había algún libro en la mesa? —dijo el mientras tenía sus brazos atrás de el, podía observar como los tres me estaban mirando

—No alteza, pero dígame cómo es, seguro está por aquí —dije, si mamá se enterará de que me eh vuelto un mentiroso me estaría pegando con todo lo que viera en su camino

—Es un libró de color rosa pastel, con detalles dorados y una flor en el centro —Dijo el primer ministro— estoy seguro que lo deje aquí—volvio a decir mientras miraba a su alrededor

—No se preocupe, enseguida lo encontraremos —dijo el heredero para después ir hacia las repisas donde estaban los baúles para comenzar a buscar

El Rey estaba junto al príncipe buscando en el mismo lugar, mientras que el ministro buscaba en la otra repisa, por lo que yo caminé al pasillo principal, vi a hermano caminar encorvado para después abrir la puerta con cuidado y salir de ahí, yo regrese mi mirada y los tres seguían ahí buscando ese libro. Mis hombros se relajaron por completo y un pequeño suspiro salió de mis labios, seguí "buscando" sólo para que no sospecharan de mi.

(....)

El día realmente había pasado rápido, también debo decir que fue por estar toda la tarde en la biblioteca "buscando" algo que ya no estaba, caminaba a lado del príncipe por el patio principal, las antorchas que estaban en las columnas y en los soportes del suelo ya habían sido encendidas, claro que esto pasaba cuando ya era de noche.

—toma —dijo el sacando de la nada un rollo de papel que traía escondido en la manga de su largo traje real —encontre el mapa con los atajos más rápidos a los pueblos vecinos, lo tome a escondidas el primer ministro es muy exigente y no deja que nada salga de la biblioteca

Yo asentía mientras lo tomaba para después guardarlo entre mi ropa.

—Disculpe Majestad, pero... Hay algo que me inquieta —le dije mientras lo miraba cara a cara, el me miraba con curiosidad por lo que seguí hablando— ¿Que les dirá respecto al "libro"?, Es decir, ¿No cree que se den cuenta de que es una mentira? —pregunte

—mmm no... Porque fue una mentira verdadera —dijo el a lo que yo lo mire confundido

—¿Una mentira verdadera? —dije no muy convencido

El asintió con una sonrisa en su rostro, me gustaría tener la misma relajación que el, hacer las cosas sin importarme si algo malo o bueno pasará. Pero a diferencia de el mi vida corría peligro y no sólo la mía también la de mi hermano.

—No te preocupes por eso ¿sí? —dijo el a lo que yo solo asentí—bien yo tengo que regresar a mi habitación, espero que te grabes bien los caminos, que quiero salir a ver esa nueva cosa de la que tanto habla byung yoen —dijo para después comenzar a caminar hacia otro lado, en cuanto a mí yo sólo me dirigí lo más rápido a la casa

En el camino iba pensando sobre la supuesta novedad del pueblo vecino, era obvio que no había nada, y si el príncipe iba mi hermano corría el riesgo de que sospecharan aún más de él, seguro mi camarada ya había pensado en algo y todo estaría bien, ¡Nunca pierdas la fé!, Diría mi madre, pero sinceramente en estos momentos no creía nada de esas palabras. Sacudí mi cabeza levemente no quería darle más importancia a esa situacion, después de todo siempre encontrábamos la forma de arreglarlo, o eso creo yo; lo que importaba ahora era que mi hermano estuviera bien y que Sun-hee se llevará el libro, aunque por la hora que era, ella ya se habrá ido de la casa. Llegué a la puerta principal de la cabaña, para dar un suspiro, de pronto mis hombros se tensaron tenía un mal presentimiento, no le di importancia y entre a la casa pero me quedé paralizado al ver al primer ministro ahí parado en medio de la habitación, mire a mi lado derecho y mi hermano estaba sentado en la cama. Levantó su mano con cuidado y temblorosa mientras la movia lentamente en forma de saludo, su mirada era de miedo y preocupación. ¿Nos habrá descubierto?, Tragué algo de saliva para después hablar claro y sin titubear.

—Primer ministro —dije entrando y cerrando la puerta —¿a que debemos su visita? —me quedé cerca de la puerta mientras lo miraba fijamente

—es curioso, —dijo el con una sonrisa mirando a su alrededor cómo si hubiera algo más importante que hablar con nosotros, sus brazos estaban atrás de él manteniendo esa postura recta e intimidante para algunos—yo les pregunto lo mismo

Mi hermano y yo abrimos los ojos, para luego mirarnos, ambos estabamos asustados, pude ver cómo mi hermano empezaba a ponerse nervioso, en cuanto a mi, yo tenía miedo, sabía muy bien a lo que se refería, decir algo como "yo les pregunto lo mismo" sólo podía significar algo. Estamos perdidos!.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo