CAPITULO 02: EMPEZAR

Al abrir mi correo me encontré varios archivos, videos, audioa  y documentación que son reales y no están hechos para hacer que otras personas piensaran mal. Solo revise tres correos. El cuarto correo que abrí de los diez que había estaba lleno de fotos de Luan besándose con varias mujeres unas con ropa otras sin nada. Yo no quise ver más y salí corriendo de la biblioteca.

Sé que mi padre al igual que mi madre estaba en la sala.

Mi padre fue a la biblioteca, mi madre me siguió. La vi llegar y la abracé, lloré casi toda la noche hasta que me dormí. Supongo que mi padre vio todo, no quería saber nada. En los siguientes días Calec mi informó sobre los archivos.

-Tu padre tiene los archivos, si los deseas ver-

-No, dile que los guarde de algo puede servirnos más adelante-

No quería enfrentarme a mi padre y aceptar que lo que me decía no eran frases vacías. No estaba lista.

-Está bien prima -contestó.

 Con las ideas más claras llamé a Luan.

-Ya, estoy en casa quiero verte- le dije.

-Estoy de viaje cariño- contestó.

Saber que no estaba en la ciudad me favoreció.

-Acompáñame, al departamento que comparto con Luan- le dije a mi primo. Él y su esposo fueron conmigo. Saqué mis cosas y le dejé una nota a Luan.

  -Luan, llámame cuando llegues, quiero hablar contigo, de algunas cosas que cambiaran entre nosotros-

Teniendo todas mis cosas conmigo, regresamos a casa . Empezar una nueva vida sin él, dolía. Los días la pasé en silencio. Solo estudiando para el próximo ciclo. Mi madre estaba preocupada y me dio la opción de no estudiar.

 -Hija, no estudies este ciclo. Mejor viaja toma las cosas con calma y relájate-

-No, madre la vida sigue, y, no seré yo quien me detenga- le contesté.

Empecé mis prácticas en la clínica de un amigo de papá. Cuatro días antes de empezar las clases. Luan me llamó, no sabía cómo actuar. Le contesté y quedamos en vernos en el café de la clínica.

Llamé, a mi primo para que me acompañe. Aunque le dije que se quedara lejos que solo le iba a decir terminemos.

Llegó la hora del almuerzo y fui al café haber algo de comer, él ya estaba ahí. Llegué pedí mi comida y me senté en una de las sillas que había en la mesa donde él estaba. Él me miró.

 -No me saludas- dijo, yo le sonreí.

 -Luan nuestra relación llegó hasta hoy- le entregué el anillo que me dio hace un año.

Me miró y se rio.

 -Es una broma verdad, estás loca, terminar conmigo, mira Tamary, ordena tus ideas luego hablamos- estaba molesto, se notaba, pero yo estaba firme.

Lo podría amar y dar hasta la vida por él, pero no quiero ser la esposa del marido de todas.

-Luan no es una broma ya saqué mis cosas del departamento. A partir de hoy solo somos conocidos. Amigos, no creo, al menos de mi parte no. Así que retírate, este es mi lugar de trabajo y no me siento cómoda con tu presencia-

Luan se fue apretando los puños. Sé que se contuvo por no hacer una escena, pero estoy segura que después me llamará y me hablará como sin nada.

Yo estoy muy segura de mi decisión.

No me di cuenta del tiempo. Vi a la señora con mi comida, ya no tenía hambre.

Llegó mi primo.

 -Felicidades por ser siempre mi guerrera valiente- me dijo él. Quise desmoronarme, se dio cuenta. 

-Hay muchas cosas que hacer, como ir a ver tu nuevo departamento. Así que nada de tristezas- comentó.

No quería saber nada de trabajo. Así que pedí permiso, podía salir normal, ya que no era una interna. solo estaba aprendiendo de los médicos, para ganar experiencia. Al iniciar mis clases quería ser una practicante oficial se lo comenté a mi padre.

-Padre puede ser posible que tu amigo me acepte como una interna oficial-

Me contestó que hablaría con su amigo.

Salimos del hospital con mi primo.

Calec y yo buscamos varios lugares y no me convencías demasiados lujosos.

Para eso mejor me quedaría en casa y tendría más comodidad y tranquilidad. Ya cuando estaba por darme por vencida, Calec hizo un comentario.

 -Prima yo conozco un lugar, está cerca de la universidad. Son departamentos para estudiantes aunque no son muy cómodos, pero estan amueblados-

Había escuchado de esos departamentos no tenía buenas referencia. El vio mi desconfianza plasmada en mi rostro y se rio.

-Linda Tamary, yo he vivido en ellos.

-Hay todo tipo de chicos-

-Es tu decisión como adulta, saber qué camino te conviene y que clase de vida quieres tener en el futuro- aunque no estaba muy convencía nos fuimos a ver si había algunos libres y ver cómo eran y de esa manera tomar una decisión ya que las clases estaban a la vuelta de la esquina.

No quedaba tiempo ya tenía que estar instalada y yo aún no tenía donde quedarme. Estaba la casa de mis padres, pero estaba muy lejos de la universidad. Por ello siempre estaba en departamentos.

Con Calec nos dirigimos hasta los departamentos.

Vimos varios, pero solo dos me convencieron, la cosa era que uno está un poco alejado del campus de medicina y tendría que ir en coche y el otro tenía una puerta en medio de la pared que conectaba al cuarto siguiente.

-Es un chico muy respetoso, las personas que se han estado en el cuarto nunca han tenido quejas- dijo la dueña.

Mi primo estaba desconfiado.

-Es un hombre el que está al otro lado del cuarto y con un ángel como tú cualquiera peca- me dio risa su comentario.

-Se podría poner la cómoda es muy pesada- comentó la dueña.

-Tiene razón, además ya no soy una niña y casi no voy a estar. El mayor tiempo me la pasaré en la universidad y en mis prácticas. Solo lo usaría para dormir- le dije a mi primo.

Sobre la comida, sería en el comedor de la universidad. Bueno solo los fines de semana cocinaría, eso si no me daba pereza y me fuera a un restaurante. Asique con dudas de mi primo firme el contrato y le adelante de tres meses a la dueña.

-Mañana vengo a dejar mis cosas- le comente a la dueña.

Ella me entregó las llaves y nos fuimos de ahí. Mañana sería un día muy largo. Además que conocería a mi vecino.

 -El muchacho se ha mudado solo, pero por ahora no está- nos comentó la dueña.

 Planeaba ir temprano al día siguiente, para hablar sobre la puerta y evitar tener malos entendido.

Llegué a mi casa cansada por el día tan complicado que tuve. Mi primo fue recibido con abrazos y besos de su esposo lo envidie en ese momento.

Me acorde de Luan me fui a mi cuarto a recordar mi sueño de fantasía que viví con él.

No sabía cómo llevar las cosas. Todos nuestros amigos los compartíamos será difícil, al menos para mí. Porque no se con cuantas de nuestras amistades se acostó con él. 

Vi algunas de las fotos, pero no reconocí las caras espero que no sea ninguna de las chicas con las que me habló, no sabría cómo hablarles a ellas.

Con respecto a Tara aaa, no sé qué haré. Quizás la mate jajaja.

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