Cuando me he levantado son las 3 de la tarde, como suelo hacer tomo una ducha para relajar mi cuerpo. Elliz está despierta desde hace rato y extrañamente se le ve muy animada lo que me parece extraño.

-¿te sucede algo?-le pregunto una vez que estoy en la sala de estar con mi ropa adecuada para el día en la casa. Sé que mi pequeña aun duerme ya que no la he visto por los pasillos de la casa.

-nada malo, Cariño.-anuncia y su sonrisa continua siendo amplia y llamativa. Me siento extrañado pero opto por no prestar atención en lo que sea que le esté pasando por su mente. Voy a mi habitación para buscar mi celular, me quedo unos minutos ojeando mis correos electrónicos y pasado unos segundos me dirijo nuevamente hacia el comedor. Donde Elliz ya se encargó de servir la comida. Tomo asiento mientras David se sienta también.

-buenas tardes-escucho la voz de mi peque&n