Dos meses habían pasado desde que Liviana y Marcus habían contraído matrimonio. Pero todo estaba como al principio, nada entre ellos había cambiado, por parte de Marcus, el seguía sin dirigirle la palabra a su esposa, se negaba rotundamente hasta compartir la mesa con ella, eso hacía que Liviana se consumiera por dentro, no era justo para ella todo lo que estaba pasando.
—Milady. — llamó su doncella Lizzy, la cual en esos dos meses había sido su única compañía, se habían vuelto muy cercanas — Es hora, el carruaje la espera abajo.
Esa noche era el baile de los vizcondes de Bolingbroke, y era por así decirlo, al primer baile que asistía desde que se había casado y no por falta de invitaciones, sino porque sabía que los aristócratas solo querían ver a la joven dama que usó el truco barato de pescar a un duque. Pero por tanta insistencia de Lady Lilian, la cual le había obsequiado un hermoso vestido azul cielo para esa noche, decidió asistir. Subió a su carruaje y su corazón latió al reconocer a Marcus dentro de este, no supo que hacer, por lo que prefirió quedarse callada. Durante el trayecto se limitó a observarlo disimuladamente, era tan guapo, y eso era peor, porque sería más difícil para ella retener sus sentimientos, quería silenciarlos pero su estúpido corazón era masoquista y le gustaba sufrir, estaba nerviosa y temía que él pudiese escuchar sus laditos, y el silencio no ayudaba. Al llegar a la residencia Bolingbroke, se bajaron del carruaje y para sorpresa de Liviana este tomó su mano entrelazándola como si fueran un matrimonio enamorado, entraron y todos los presentes miraban buscando algo que los hiciera hablar toda la noche.
¿Y cómo no? Era al primer baile que los futuros duques asistían desde su boda.
Marcus moría por librase de su esposa, realmente no la soportaba, tenía que estar de su mano aunque fuera mitad de noche, empezaba a sentir asco, la mono de Liviana sudaba mucho y eso lo tenía aún más impaciente, ya quería ver a su amada Emma, esa noche ella le había pedido verse en el jardín de los vizcondes.
—Lady Liviana ¿No? — dijo uno de los amigos de Marcus y ella se sintió cohibida. — Esperaba conocerla en los anteriores bailes.
—Es que me sentía indispuesta. — respondió ella con la misma excusa de siempre—
—Seguro ha de estar embarazada. —bromeó Christian Evans, el futuro Marqués de Winchester, también amigo de Marcus y de Anthony, a quien por cierto no había visto esa noche—
Marcus se tensó ante las palabras de Christian, aunque sabía que lo decía en broma- ya que también estaba al tanto de la situación de los recién casados- no le agradó escuchar que su queridísima esposa pudiese estar embarazada.
—Muy gracioso Evans— dijo Marcus sin gracia—
Liviana bajo la mirada avergonzada ante la conversación de los hombres, ya era hora de dejarlos solos, pero no tenía valor de soltar la mano de Marcus, no sabía cuándo tendría otra oportunidad de estar así con él.
—¿Y Ross dónde está? —preguntó Christian—
—No lo sé, debe de estar enamorando a alguna dama, sabes que de los tres él es el más enamoradizo. — respondió Marcus y ambos rieron—
—¡Livingston! — llegaron otros dos hombres, los cuales Liviana no sabía quiénes eran, como había mencionado antes no conoce a todos los amigos de su esposo —
—¡Oh! ¡Los hermanos Williams! —dijo Marcus y fue la oportunidad para él de soltar por fin a Liviana, saludó a sus otros amigos sonriendo—
—¿Cómo estas amigo? — preguntó uno de los hombres que llegaron, este era alto, cabellos rubios, ojos azules muy claros, realmente hermosos. Marcus hizo un asentamiento respondiendo su pregunta — Evans.
Christian hizo el mismo gesto que Marcus para responder. Liviana levantó una ceja al no dejar desapercibido el tono que utilizó el hombre para saludar a Christian Evans. Al parecer no son muy amigos.
—¿Cómo les fue en su viaje a Francia? — pregunto Marcus aligerando el ambiente —
—De lo mejor, París es una hermosa ciudad, Leo no quería regresar a Londres, hasta se quería casar con una francesa. – respondió el otro, que hasta el momento no había hablado; eran muy parecidos, alto, con ojos también azueles pero más oscuros, y sus cabellos en vez de rubio era de un tono miel dorado, y está de más decir que era realmente guapo —
—Sí, claro, ¿Qué me dices de ti? Querías cortejar a Lady Arlette, la princesa de Francia. — todos se echaron a reír y por un momento Liviana lo hizo también hasta que uno de ellos le habló—
—¿Y esta hermosa dama quién es? — preguntó el de ojos más oscuros, quien no dejaba de mirar a Liviana, lo que hacía que ella enrojeciera. Marcus miro entrecerrando los ojos a su amigo—
—Es mi esposa. —respondió Marcus tomándola nuevamente de la mano, Liviana lo miró sorprendida por aquel gesto— Liviana Livingston, futura duquesa de Aganes.
—¡Wow! No sabía que te habías casado. Felicidades entonces, y doble, una por tu boda y otra por ser tan afortunado en encontrar a tan hermosa mujer.
—¿Y cómo lo ibas a saber Logan? Si vives viajando de un lugar a otro. – respondió Marcus –
—Es que soy un paloma libre mi querido amigo. — respondió Logan, como lo había nombrado Marcus — Soy Logan Williams, futuro Duque de Windsor.
—Y yo Leonardo Williams, futuro Marqués de Normanby. — se presentaron ambos hermanos ante Liviana—
—Es un placer conocerlos. — dijo cortésmente haciendo una pequeña reverencia —
Después de las presentaciones siguieron hablando hasta que Marcus se disculpó y salió del grupo en busca de una copa, lo cual era solo una excusa, ya que había llegado la hora acordada para verse con Lady Emma. No le había importado dejar a su esposa, pero sintió la espinita de que la dejaba a merced de Logan, quien no le quitaba el ojo de encima; sacudió su cabeza olvidando el tema, no le importaba, solo se concentró en que pronto estaría con su amada Emma.
—¡Oh Marcus por fin llegas! — Emma se lanzó a los brazos de Marcus abrazándolo — Ya te extrañaba, no soportaba verte de mano con esa.
—Imagínate yo, contaba los minutos para poder verte mi amor. —dijo Marcus para besarla — ¿De qué querías hablar?
—No sé si bebería de decírtelo Marcus, me da mucha pena. — dijo bajando la cabeza—
—Puedes decírmelo mi amor ¿Acaso no confías en mí?
—¡Claro que sí! — respondió ella — ¿Pero luego qué pensarás de mí?
—Solo dímelo Emma. — exigió Marcus —
—Como sabes, mi padre al morir nos dejó una gran deuda a mi madre y a mí, gracias a mi tía, la Baronesa Petre, estamos viviendo por ahora, pero no será por mucho, mi madre quiere que me case con un noble pero yo no quiero, sabes que te amo a ti Marcus.
—Lo sé, y no dejare que te cases con nadie, solo tenemos que esperar unos dos años para que mi padre me ceda el título de duque, entonces podre anular mi matrimonio con Liviana por no haberlo consumado y tú y yo podremos casarnos.
—¿Pero que le diré a mi madre? ¿Cómo nos haremos con los gastos? —preguntó ella con lágrimas en los ojos—
—Por eso no te preocupes, yo cubriré tus necesidades mientras pasa este tiempo. Solo tenemos que ser fuetes y aguantar, saldremos de esta. — Marcus la volvió a besar con pasión, porque era lo único que había entre ellos —
Los dos se despidieron con un último beso, Marcus entró nuevamente al salón de baile mientras Lady Emma lo observaba con una sonrisa de victoria en sus labios, su plan estaba dando frutos y esperaba que los futuros fueran aún mejor.
—No te voy a dejar ir Marcus Livingston, serás mío completamente. — susurró esta antes de caminar hacia el salón de baile e incorporase junto a su madre y tía quienes la esperaban para recibir buenas noticias.
Después de todo en la alta sociedad, todo no es lo que parece.
Semanas después el rumor de que Lady Emma y el futuro duque de Agnes tenían encuentros clandestinos se esparció por todo Londres, pero Liviana se encontraba ajena a esos comentarios, ella vivía encerrada en su residencia, solo recibía la visita de Lady Lilian, a veces de algunos de los amigos de Marcus como Anthony y el mayor de los hermanos Williams, Lord Logan y por supuesto las de su nana, quien siempre iba a visitarla cada vez que podía, nunca dejaba de preguntar por su padre, ya que desde que se casó no lo ha vuelto a ver, y gracias a su nana supo que estaba de viaje por América, una parte de ella lo extrañaba, a pesar de todo era su padre.—¿Qué pasa Lizzy? Desde hace unos días te noto algo distraída. — preguntó Liviana mirando a su doncella preocupadamente——No es nada Milady. — respondió ella cepillando el cabello oscuro de Liviana, pero ella se giró tomado el cepillo ——No, sé que te pasa algo, tú siempre hablas cuando me estás cepillando el cabello o cuan
Tres años habían pasado desde que su esposa se había ido al campo, habían sido los mejores tres años de su vida, viviendo como quería y con quien quería. Miraba por la gran venta de su habitación, mientras que en su cama dormía una Emma desnuda después de haber pasado una noche muy movida. Durante todo este tiempo había vivido en su casa de soltero con Emma, y claro, a escondidas, aunque todos sabían de la relación que mantenían ellos dos, ya no era un secreto para nadie. Solo esperaba que su esposa atendiera a su llamado para poder anular su matrimonio.Esperó que el sol diera su primera vista y que la mañana se aclarara más para acudir a la residencia de sus padres, tenía preparada una reunión con su padre, justamente para atender los papeles que le cederían el título que le correspondía por derecho. Estaba más que feliz, sabía que obteniendo el título de Duque de Agnes, tendría derechos y libertades a unas ciertas cosas más, como por ejemplo la anulación de su matrimonio co
Liviana reía alegremente mientras hablaba con su amiga Jayne, la había conocido meses después de llegar a la residencia en el campo, Jayne William, hermana menor de los mellizos William, amigos de su esposo, se había enterado después de varios días al preguntarle por su familia, al igual que le había preguntado por qué vive en la residencia de campo de sus padres y no en la ciudad disfrutando de la temporada, y su respuesta fue: «Para no avergonzar a mis padres más de lo que ya he hecho» . Digamos que Lady Jayne había perdido su oportunidad de casarse, ya era considerada una solterona para los aristócratas.—No creo que volver a vestir con esos pesados y apretados vestidos me haga bien, ya estoy tan acostumbrada a usar estos vestidos más sencillos que la sola idea hace que el aire me falte. – dijo su amiga mirando su vestido color pastel, y sí que tenía razón, en todo el tiempo que ha estado en la residencia de campo sus vestidos han cambiados por otros más sencillos y h
Ahí estaba la respuesta que esperaba, Liviana había vuelto, y era de esperar, ella babeaba por él, y más ahora que el motivo de su regreso fue el de supuestamente darle un heredero.—Hijo, que bueno que llegaste, pensé que estarías aquí para recibir a tu esposa. — Lady Lilian actuó e hizo como si no supiese nada de la llegada de Liviana ——Es que no sabía que regresaba hoy. — respondió Marcus sin dejar mirar a su esposa, quien sonreía inocentemente –—Siento no haberte avisado antes, creí que seguramente estabas haciendo algo más importante que mi simple llegada a Londres. — respondió Liviana, Marcus levantó una de sus cejas al escuchar lo acusadoras que sonaban sus palabras ——Lo importante es que ya estás aquí. — dijo Marcus. — ¿Madre, quiere que la escolte hasta su carruaje, es que tengo algunos asuntos que hablar con mi… esposa?—¡Claro! — respondió Lady Lilian — Que
—¿Marcus que te pasa? Te he notado distraído, esta noche mientras hacíamos el amor te mostrabas frio y distante, como si estuvieras en otro lugar. — dijo Emma recorriéndole el pecho desnudo —Ni el mismo sabía qué le ocurría, nunca le había pasado estar con una mujer y pensar en otra, y mucho menos si esa mujer era su esposa. Desde que la vio en la bañera no había podido olvidar como frotaba la esponja contra su piel, luego estaban sus piernas, esas que se veían hermosas y sensuales, ¿Cómo se sentirían alrededor de su cadera mientras él se hundía en su interior y disfrutaba de sus gemidos?¡Joder! Otra vez se ponía duro de solo imaginar la escena, la situación no podía seguir así, una cosa era desear a su esposa pero otra muy distinta era estar fantaseando todo el tiempo en cómo sería hacerla suya, y esa palabra sonaba muy posesiva para su gusto.—No es nada… en realidad… — suspiró hondo antes de hablar — Liviana está aquí. – dijo tratand
—Estás hermosa Liviana. — dijo Jayne –—¿Tú crees? Es al primer baile al que asisto después de tres años. — dijo Liviana mirándose aun en el espejo —Era innegable, estaba realmente hermosa, ambas lo estaban, Liviana había decidido volver a presentarse en sociedad con un hermoso vestido rojo pasión con algunos detalles negros, era un diseño algo escotado dejando un poco libre sus hombros, aunque su oscuro cabello peinado con hermosos ondas caían como cascada sobre ellos, su cuello lo acompañaba una gargantilla a juego con el vestido dándole un toque encantador. Mientras que Jayne iba con un vestido parecido pero este era dorado con detalles blancos, su cabello tenía un recogido hermoso dejando suelto algunos mechones haciéndola ver más juvenil y encantadora.—No te mentiría Live, Marcus se quedará fascinado contigo.—A Marcus no le fascina nada de mí. Nos podemos llevar bien, pero eso no significa
Pss Pss PssPara los que tuvieron la dicha de asistir al baile de los duques de Devonshire anoche, no es sorpresa lo que leerán hoy. Y es que he visto con mis propios ojos queridos lectores a la recién duquesa de Agnes anoche en el baile de los duques de Devonshire. Ha regresado después de tres años y no podemos negar que se ha vuelto verdaderamente hermosa, además, los ojos de los hombres presentes no me dejarán mentir, lo impresionante fue verla rebosante de vida cuando el mismo duque, su esposo, declaró que estaba enferma. Pero seamos sinceros, todos sabemos que la verdadera causa de la partida fue la relación no tan clandestina de su esposo y Lady Emma Ashton. ¿Quizás haya regresado a reclamar el puesto que le pertenece como duquesa y esposa? Por otro lado también tuvimos la dicha
Pss Pss PssHe escuchado por ahí queridos lectores que el verdadero motivo por el cual regreso Lady Liviana Livingston fue para anular su matrimonio con el duque de Agnes. Es tremendamente vergonzoso y humillante para la duquesa quedar nuevamente soltera. No creo que el matrimonio no se haya consumado, y más después de tres años, aunque si hacemos cálculos, el matrimonio solo estuvo junto menos de un mes, después de eso, Lady Liviana se retiró al campo y nunca presenciamos la ausencia del duque en Londres, y más cuando estaba ocupado con Lady Emma Ashton. ¿Podríamos afirmar que Lady Liviana aún mantiene su honor? ¿Lograríamos decir que Lady Liviana es quien pide la anulación, o tal vez el duque para ser libre de casarse con su amante?Revista de sociedad de Lady Kennt. Liviana no podí