2.

21

Horas antes.

Estábamos todos en la habitación de Alonzo mientras sonaba música de Stone Temple Pilots e Iván terminaba de empacar por él. No confía en cuando ellos dos empacan, por eso él lo hace por ellos porque siempre olvidan cosas fundamentales, son un poco olvidadizos. Me tapé con la cobija de Alonzo, su aire acondicionado lo enciende en lo más fuerte siempre, se le van a congelar los testículos.

-No nos van a pagar lo que estamos acostumbrados. -Comentó Iván, de inmediato Simón se levantó de la cama y lo miró como si quisiera incendiarlo.

-¿Qué estás insinuando? No pasaré varias semanas con el culo metido entre los huevos en carretera para que me paguen menos.

-Nos pagarán más pedazo de imbécil, pero tendrán que ir a bastantes eventos privados. Es todo.

-Está bien. -Se acomodó bocarriba en la cama y agarró su teléfono. -Empaca mis preservativos, no confío en los condones de gasolinera que venden en Texas. Se rompen, me consta.

-¿Ya estás pensando en eso? -Pregunté.

-Claro, ¿en qué más quieres que piense? ¿en libros? ¿alcohol? Hablando de alcohol, debo aprovisionarme, no me gusta el alcohol triple X de EEUU, me da diarrea.

-¿Crees que en el aeropuerto de Bogotá podrás pasar alcohol? -Pregunté, el abrió la boca y luego la cerró.

-¡Deberíamos tener ya un avión privado!

-¿Y no lo tenemos acaso? -Preguntó Alonzo. Simón rió avergonzado. -Y dejen de hablar que no me puedo concentrar. -El disparaba sin parar en su consola.

Por la noche salimos al parque que queda detrás de la casa, cerca de las diez de la noche salimos a contar historias de terror porque había un apagón en el vecindario. En nuestra casa esto no afectó porque hay planta eléctrica, así como en algunas casas cercanas, pero no en todas. Este es un vecindario estrato seis, el más alto de la ciudad, pero, aun así, se va la luz como cuando vivíamos en el sur. Entonces salimos porque estaba oscuro y Simón es el mejor relatando historias de terror. Nos sentamos en el césped en el parque de la electrificadora que así se llama, nos pusimos debajo de un árbol y él sacó su teléfono y alumbró su rostro. Contaba sobre una de las tantas noches en la casa de abuela (él tiene miles de relatos escalofriantes de ahí porque según él, quién vivió antes asesinó a varias personas), los chicos lo escuchaban embobados, pero yo estaba distraída. Hacía frío por la hora y cómo no había luz, no había reflectores que calentaran un poco. Sentía algo extraño, me sentía preocupada por algún motivo y no sabía que era. Empecé a pensar, no era un asunto con mis padres, ayer hablé con ellos y están bien con el dinero que les mandé, no es algo de salud porque la cirugía de columna que me hice hace dos años fue exitosa y los dolores que me dan a veces el doctor me dijo que son normales. ¿Si no es algo de salud, familiar o económico, qué es? ¿hay algo que estoy olvidando? ¿qué me preocupa tanto?

-¿Por qué estás tan distraída?- Me preguntó Iván.

-¿Hay algo que estemos olvidando?

-Siempre olvidamos algo. -Alonzo se encogió de hombros. -¿Sabes que me caería de puta madre?

-Ya sabemos qué dirás, alcohol. -Respondió Iván.

-No, me caería perfecto trolear al malnacido de Mario, aún no lo he logrado, no sé cómo encripta todas sus redes, pero lo lograré y haré que nos pague la puerta que nos expropió.

-Yo le quise fue expropiar la vida a ese idiota. No sé para qué lo hizo o qué ganó con eso, nos tocó cerrar la casa con un colchón toda la semana. -Se quejó Simón y era cierto, tuvimos que poner un colchón de pie en la entrada por ocho días en lo que conseguimos la puerta.

-Éramos lamentables. -Dijo Alonzo.

-Aún lo somos. -Dijo Iván.

-Ustedes tres si lo son, yo no. Soy fabuloso, miren esto. -Simón se levantó el suéter y los chicos estallaron en risas al ver lo que nos mostró, ¡se hizo un par de piercings en los pezones! Los exhibía orgullosos y yo por poco me desmayo de la vergüenza ajena que me provocaba.

-Simón, pareces actriz porno. -Comenté y me mostró su dedo del medio.

-Lo sé, ¿no es genial?

Al rato llegó la luz y jugamos voleibol hasta pasadas las 2am.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo