En el camino todos los familiares de Xavier estaban devastados después de lo que había pasado, era un camino de mucho silencio y tristeza por la pérdida de Constance, quien había dado su vida para que todos escaparan con vida después de haber aceptado que todo estaba perdido. Los más afectados obviamente fueron, Coraline quien lloraba hasta quedarse dormida, ya que era muy unida a su mama, ella era uno de los pilares más grandes de su vida desde que era pequeña. Como también el mismo Xavier, quien se sentía fatal por lo que estaba pasando, sentía que todo era su culpa, aunque no lo fuera, los pensamientos de que si él se hubiera ido solo nada de esto hubiera pasado, Coraline seguiría teniendo una vida normal con su mama, al igual que sus amigos de no ser por él.

Todos estos pensamientos atormentaron a Xavier durante todo el camino, de manera que no era capaz de decirle algo a Coraline por miedo a que esta lo odiara, con toda la razón del mundo, o por lo menos lo era para Xavier…

-Tenemos que parar un momento, ya casi no tenemos gasolina y a menos que quieran quedarse varados en la carretera, debemos parar un momento a recargar el tanque.- Expresó Sabrina mientras iba manejando.

-No hay mucha diferencia si nos quedamos varados, porque tampoco es como si supieras a donde vamos o si estamos más cerca de nuestro destino.- Dijo Coraline después de ir en silencio por todo el viaje.

-Bueno, tienes un punto, pero es mejor tener un carro en medio de la nada que ir a pie, por lo que debemos parar, según el GPS estamos cerca de una estación de gasolina, ahí podemos preguntar direcciones y comprar algo para comer.- Expresó Jasón mientras miraba el teléfono y miraba de reojo a Xavier, quien solo miraba al piso con una mirada vacía.

-Además, servirá para poder estirar un poco las piernas, ya que tenemos un buen tiempo en este camino.- Dijo Sabrina mientras también observaba a Coraline, quien estaba devastada por la pérdida de su mama.

-Como sea.- Expresó Coraline con un tono de molestia, cosa que hizo que Xavier se sintiera aun peor.

-Está decidido.- Expresó Jasón, que fue lo último que se dijo antes de que llegaran a la estación de gas.

Luego de eso, solo quedo más silencios incómodos y mucha tensión en el carro antes de que llegaran. Al llegar a la estación la primera en bajar fue Coraline sin darle tiempo a Xavier de decir algo, puesto que este tenía la intensión de intentar a hablar con ella de lo que había pasado…

-Corali…- Intento decir Xavier con un tono de voz muy bajo a su prima, la cual no espero a que este terminara de decir su nombre para bajar del carro.

-Dale tiempo Xavier, entiendo lo que quieres hacer pero recuerda que las cosas son muy recientes y ella era muy unida a su mama. Ella solo necesita tiempo, dudo que está molesta contigo.- Le dijo Sabrina a Xavier mientras todos se bajaban del carro.

-Eso espero…- Dijo Xavier con un tono de voz tan bajo que casi ni se escuchó, para luego irse al baño.

Mientras tanto en otros lugares…

-¡Uhg, no puede ser que se les hayan escapado tan fácilmente por una señora que no sabe usar un arma. Ustedes eran un batallón de militares que están entrenados para esto y no pudieron ni manejar la situación!- Expresó el militar de alto rango mientras le gritaba a su batallón.

-Señor, lo que pasa es que nos tomó a todos desprevenidos y….- en eso su superior no deja que termine de hablar para gritarle nuevamente con insultos muy fuertes.

-¡¿A mí que me importa sus excusas?, no hay excusa que valga, todos ustedes fueron vencidos por una señora, ¿vencidos por una mujer?, ¿en serio?!- Expresó el militar de alto nivel.

-Okey, ya es suficiente.- Dijo el científico detrás de toda la operación.

-¿Disculpa?- pregunto el militar de alto rango quien se dio la vuelva para intentar intimidar al científico.

-Dije, que ya es suficiente, ¿tengo que volver a decirlo?, espero que no, porque creo saber muy bien como son las cosas.- Le dijo el científico al militar de alto rango.

-¿Y cómo son las cosas según tú?- Preguntó el militar de algo rango impresionada de una respuesta así.

-Que tú y tus hombres son una manada de inútiles que carecen de cerebro o pensamiento en lo absoluto, rebajarte a decir que una mujer no puede vencer a un hombre solo me confirma que eres una basura de persona que está acostumbrado a ordenar, sin tener la más mínima decencia, o respeto, o algo, ya que te crees mejor que nadie por tener un rango que no vale de nada en la vida real, ya que no puedes ni atrapar a un chico con todo el equipo militar que quieras.- Expresó el científico al militar haciendo que este se molestara de escuchar la cruda realidad.

-Mira, las cosas son…- Preguntó el militar algo molesto

-No, el que tiene que escuchar aquí eres tú, tu eres el que no ha cometido nada más que errores desde que empezó todo, y más mandando a una cuerda de estúpidos que les encanta disparar, a una misión que debe ser cautelosa, las cosas no funcionaron a tu manera, ahora será a mi manera.- Dejó muy claro el científico mientras se iba a mover alguna influencias.

Volviendo con Xavier y su familia, este decidió fumar un rato para liberar algo de estrés y no pensar tanto, cuando se percató de que Coraline estaba pasando por el mismo lugar donde él estaba, fue en ese momento en el que decidió intentar hablar con su prima, por más nerviosos que estuviera.

-Coraline… yo… se… yo sé que tú debes estar odiándome por lo que paso, no te culpo. Yo también creo que esto jamás me lo voy a perdonar, y… y…. so… solo… solo…- Expresó Xavier a quien no le salían las palabras quien enseguida rompió en llanto por lo que estaba pasando. -Solo quiero que sepas que no tienes que perdonarme, ni volverme a hablar por lo que hice, nada de esto hubiera pasado si yo me hubiera ido solo, y es mi culpa que todos ustedes tengan que pagar por mis platos rotos, así que entiendo que jamás quieras volver a verme…- Dijo Xavier a su prima, quien rápidamente se acercó hacia donde estaba el para abrazarlo.

-Yo no te odio, nunca lo hecho, tú no tienes la culpa de lo que está pasando. Si estoy muy dolida y molesta por todo lo que ha sucedido, pero no es por ti, sino por los que quieren llegar hasta ti, y ahora más que nunca debo estar contigo. Eres la única familia que me queda.- Le dijo Coraline a su primo mientras lo abrazaba. Luego ambos comenzaron a llorar un rato.

Después de que Coraline y Xavier se desahogaran, ambos vieron que ya era tiempo para que siguieran su camino, puesto que su destino no estaba muy lejos, y también sabían ya cómo llegar.

-Señor, si soy yo, ya sabemos a dónde va su objetivo. Van a donde había predicho, van hacia la zona de comercio.- Le dijo un señor misterioso al científico.

-Excelente, entonces solo habrá que llegar antes que ellos para atraparlos.- Dijo el científicos para luego colgar la llamada.

-¿Quién era ese?- Preguntó el militar de alto rango al científico.

-Alguien que sí pudo hacer lo que tú, en todo este tiempo, no has hecho. Mueve a tus fuerzas, debemos tenderle una trampa a Xavier en la zona comercial.- Expresó el científico mientras sonría.