Camila había llegado a aquel instituto como de costumbre siempre temprano, sabía que Lauren siempre llegaba un poco tarde pero nunca para faltar a una clase, no era la mejor pero si una chica puntual.

Lauren por su parte se encontraba emocionada a un límite un poco exagerado sobre el pensamiento de como llegaría Camila sabía que el día anterior la había visto con Chad, con el molesto  e imbécil de Chad pero ya se encargaría de ese chico un poco más adelante cuando tuviera tiempo de sobra porque ahora no lo tenía, ahora quería saber ¿En dónde estaba? ¿Con quién? y demás variación de información sobre su castaña, no era de ella pero ya entienden, los años.

-Hasta que te veo- dijo Lucy llegando al lado de Lauren cuando salió de su auto.

-Nunca llego tarde y lo sabes- respondió mientras le daba un beso en la mejilla perfilando una de sus lindas sonrisas.

-Llegaste tarde por ¿Chad o por la Nerd?- dijo juguetonamente, así le decían ellas en el colegio, a Lauren no le molestaba que le dijeran así a la morena, es más le gustaba porque eso era una linda, sexy y atractiva Nerd, anda divagando.

-JA.JA.JA- le respondió lo más sarcástica que pudo -Por mis clases- respondió mientras llegaba al casillero que le habían asignado, pero aunque su casillera estaba en frente miraba para todos lados.

-Pues para ser una clase estas muy pendiente de que casillero es mejor- le susurró al oído su amiga con una sonrisa.

-¡Calla!- susurro entrecerrando sus ojos.

-¿Porque estas con Chad entonces?- pregunto Lucy, no le molestaba la morena, en realidad le caía bien bastante bien a decir verdad, era agradable cuando estaba en silencio que era casi siempre y cuando hablaba dejaba salir su humor, lo que le molestaba era su amiga y su poca valentía para decir las cosas de frente.

-No lo sé, de verdad- dijo encogiéndose de hombros mientras se recostaba en el casillero al mismo tiempo seguía mirando para todos lados.

-Allí- apunto Lucy en una dirección específicamente -Esta el casillero que no te importa- dijo riendo apuntando al de la castaña que estaba abriendo uno de los casilleros del instituto.

-No esta tan lejos del mío ¿Verdad?- le pregunto Lauren mientras contaba pasos mentales, se veía su concentración al ver la distancia que les separaba.

-¡Oh Dios!- dijo Lucy pegando la frente de su casillero que estaba al lado del de Lauren.

El timbre sonó y por consiguiente cada alumno fue directo a cada clase, Lauren sabía que la castaña asistiría a esta escuela, pero estaba algo dudosa ya que el ultimo día que la vio en escuela ella había escuchado hablar a la morena con sus padres sobre a donde asistir, sus padres pedían una y ella otra diferente, seguro ninguno gano y tomaron una por tercero, que le alegro el día a Lauren.

-Mira qué casualidad- dijo Lucy cuando se sentó en la banca esperando que su amiga tomara el asiento a su lado.

-¿Qué?- dijo Lauren mirándola sin prestar mucha atención a sus lados.

-Compartimos clase con la Nerd- comento mirando hacia la chica aunque no estaba segura de que su amiga estaba mirándola -¿Por cierto porque ahora usa camisas manga larga?- pregunto Lucy extrañada ya que era inusual en ella.

-No lo sé, ayer la vi también así- respondió Lauren y ambas chicas se encogieron de hombros y se dispusieron hablar tratando de dejar por un rato de lado a la morena que estaba metida con la nariz en un libro.

-Hola ¿Puedo?- pregunto una chica pequeña al puesto vacío que estaba al lado de Camila.

-Claro- respondió con una sonrisa cuando había alzado su rostro al escuchar la voz de la chica a su lado, lo que fue captado por Lucy que se encargó de señalarse a Lauren.

-Te la están quitando- dijo juguetonamente la colombiana mientras le daba un empujoncito con su hombro a su amiga.

-Cállate- giro la cabeza algo molesta y cruzo sus brazos.

-Mi nombre es Allyson- dijo la pequeña apuntando su mano a la castaña.

-Camila, un placer- le contesto cortésmente la morena volviendo a lo que estaba haciendo.

-¿Vives por aquí?- pregunto ya que el profesor aún no había llegado.

-Si algo así- medio respondió entre seco y corto.

-Eres de pocas palabras- jugueteo Ally aun con una sonrisa.

-Sí, también algo así- dijo con una sonrisa de lado.

-¿Tienes una materia favorita?- pregunto la más pequeña mientras sacaban sus libros, quería hacer charla pero esta no se dejaba para nada.

-Sí, esta- le respondió simple y muy pero muy corto.

-¿Literatura?- pregunto y Camila asintió tratando de que la conversación muriera y la dejara entrar en su suave y muy conocido silencio.

-Buenos días chicos y chicas, es un placer que estén aquí bla bla bla- agito su mano - Soy su profesor de literatura y aunque quiero hacer que se presenten eso es muy de tontos, así que cuando pase lista alcen su mano para reconocer sus caras y evitarnos el -¿Y cómo te llamas? y bla bla bla- dijo con gracia el profesor volviendo a mover su mano lo que causo la risa de todos en el salón de clase.

El inicio de la clase fue amena y tranquila, cada quien alzo la mano tal cual como dijo el profesor hasta que fue el turno de la castaña.

-Camila- dijo el profesor alzando su mirada para ubicar a la persona, miro a todos lados hasta encontrarse con una mano alzada.

-Presente- respondió y el hombre asintió en su dirección.

-Otra vez la nerd- dijo un chico que siempre estaba diciendo esos tipos de comentarios, nadie sabe cómo termino aquí.

-¿Algún problema joven?- pregunto el profesor quitando sus lentes.

-Sí, la cuatro ojos- dijo para que todos rieran y nadie le siguió el juego, el profesor modio un poco los lentes mientras lo miraba.

-Joven es una grosería lo que acaba de decir hacia su compañera- respondió el profesor negando.

-Bueno, hasta donde sé, el nunca ha tenido cerebro- dijo Lauren ahora si ganándose la risa de todos, incluso la sonrisa de Camila e incluso la del profesor.

-Sigamos- dijo el profesor con todavía su sonrisa intacta

La clase termino tan bien como había empezado, luego de las clase el profesor había obligado al chico a pedir disculpas cosa que hizo apenas vio la mirada atenta de todos sobre él y la castaña.

-Hola- dijo Lauren a una Camila delante de ella cuando llego a ella en la fila de la cafetería.

-Hola Lauren- dijo indiferente Camila mirando hacia adelante tratando de evitarla, luego de verla con ese chico muchas cosas se habían removido en su interior y entre ellos la tristeza.

-¿No me quieres hablar?- pregunto algo triste Lauren viendo la espalda de la morena que se encogía de hombros, sabía que Camila siempre la evitaba pero esta vez si le estaba doliendo, sabía que debía ser por el estúpido y entrometido de Chad.

-¿Y tu novio?- pregunto Camila, ya sabía que era por él. Era de esperarse luego de que me besara justo cuando podía tener un par de palabras con ella.

-No lo sé y no me interesa- le respondió mientras Camila trataba de descifrar que quería decir aquello, se giró para mirar su rostro ante aquella confesión. -No es algo de pensarlo, solo no me apetece estar con el- le respondió sincera tratando de darle la respuesta que Camila estaba buscando al mirarla fijamente.

-Es tu novio- dijo la morena un poco seco y algo entrecortado luego de tomar lo que quería de aquel sitio.

-Lo se ¿Y?- pregunto cómo quitándole la mayor importancia a tener un novio, Camila se encogió de hombros aun sin poder entender a la mujer delante de ella.

Camila tomo todo aquello que quería al igual que Lauren y en sumo silencio como siempre estaba acostumbrada camino fuera de la cafetería a las mesas alejadas, cuando se giró Lauren estaba de tras de ella.

-¿Qué haces aquí?- le pregunto mientras se sentaba bajo la atenta mirada de Lauren sobre ella.

-¿No quieres?- pregunto algo dolida la ojiverde, era la segunda vez en el día que le hacía sentir ese suave dolor en el pecho y la morena negó antes de hacer que la ojiverde se sintiera peor, era muy expresiva.

-Pensé comerías con gente nueva- dijo apuntando al interior de aquel sitio abarrotado de jóvenes en diferentes mesas hablando de todo y nada.

-Me gusta seguir hábitos- le contesto encogiéndose de hombros y restándole importancia a la situación y sobre todo le saco una sonrisa a la morena.

-Sí, los hábitos son buenos- confeso Camila para dejar a Lauren mirándola un rato con una sonrisa en sus labios, sabía que valdría la pena arriesgarse a comer juntas.

-¿Quien la chica con hablabas?- pregunto Lauren tomando un bocado de la comida que había tomado, y sobre todo para no parecer una persona desesperada de respuestas.

-Ally- respondió Camila mirando atentamente a Lauren que intentaba disimular la mueca en su rostro.

-¿Qué quería?- pregunto en tono inocente y que la hacía ver como si saber la información era algo trivial, no quería que se le notara lo ansiosa de saber que realmente quería, Camila no le sonreía a cualquiera.

-Nada- respondió mientras Lauren elevaba la comisura de sus labios porque Camila había hablado con ella y además había respondido lo que ella le había preguntado, un gran e inmenso avance.

Luego del almuerzo como siempre cada quien tomo su camino, Camila a la biblioteca y Lauren hacia el gimnasio. Eran las audiciones de las porritas y ella ansiaba estar allí, mover los pompones, usar ese uniforme y agitarse al movimiento del baile, aquello le encantaba y desde que estaba a punto de salir del colegio estaba emocionada por poder entrar a las porristas.

-Lauren- le llamo la entrenadora mirando hacia el papel y luego alzo la mirada para encontrase con la joven ojiverde en el centro de la cancha techada.

Aunque todos pensaban que era ruda no lo era, solo le gustaba el orden que todo estuviera perfecto, como cualquier profesor perfeccionista.

-Esplendido Lauren- le comento mientras asentía en la dirección de la chica luego hizo un ademan con la mano para que la ojiverde fuera a sentarse.

Luego de ver a su amiga concursar y una que otras chicas tan buenas y otras tan malas habían acabado las audiciones, tomaron sus pertenencias y aun con la ropa de ejercicio estaban atentas a la entrenadora.

-Mañana se les avisara quienes quedaron- les comento la entrenadora dándole una sonrisa para terminar saliendo de la cancha.

-Mañana será nuestro día- comento Lucy golpeando su cadera junto con la de Lauren para así salir del lugar.