Los días pasan y verdaderamente es un infierno. Problemas en el campus con el idiota de mi profesor, enfrentamientos con Moisés, enojos con las chicas y cabreos con Lean. Maldita sea no me deja en paz, lo hace todo para fastidiarme la vida y ella lo sabe, sabe que odio verla sonreírle a alguien más, odio que mire a alguien más, odio que esté con alguien más.
No he podido conocer al imbécil que la hizo suya por primera vez, y no puedo preguntárselo a ella porque se negará y además no me habla. ¿Por qué no me habla? Toda ella me confunde, toda ella me altera y toda ella me desequilibra y yo no puedo hacer nada contra eso. Por primera vez en mi puta vida no puedo hacer algo y se siente de la mierda.
¿Canto puede aguantar un hombre con una confusión y una ira que no entiende? ¿Cómo puede un hombre evitar que la insolente mujer que lo vuelve loco salga de s
Cabreado y bramando por no saber actuar ante Lean salgo del salón que he estropeado en su totalidad.—Señor Hamann— me tenso completamente al escuchar la voz del perfecto —¿Qué hacía en ese salón?— al girarme le veo asomar la cabeza al interior del salón y maldigo —¿Usted ha hecho esto?— me mira y yo me encojo de hombros.—Justamente iba a buscar al responsable, iba pasando y escuché mucho ruido. Para cuando llegué el tío se había esfumado— el perfecto rueda los ojos, esa explicación fue patética.—Vamos Hamann, te sabes el camino— resoplo cabreado.—Perfecto, por favor, ahorrémonos esto y simplemente dígame cuanto debo pagar. No estoy para sermones— el perfecto alza las cejas casi poniéndosela de peluquín.—No me haga repetírselo señ
—Eres la persona más detestable que he conocido en toda mi vida— grita enfurecida, le miro de reojo, ha reaccionado tarde y parece loca —pero claro… tu vida es tan mierda que quieres sumergir a los demás contigo. ¿Cómo no de sentir lastima por ti? Eres frio, mujeriego, arrogante y tienes un ego que te tapa la vista— sonríe —te compadezco Kahin, y gracias por demostrarme una vez más que junto a ti no puedo tener más qué adicciones y dolor— miro el camino fijamente, todo lo que ella dice es cierto, pero aun así me dijo que me ama.—Y aun así estabas dispuesta a ser señala, aun así me amas— no sonrío, me limito a mirar la carretera.—Y que error el que estaba cometiendo— eso dolió más que tres patadas seguidas a mis testículos.—¿Puedes parar de una maldita vez?— le gru&
Listo con mi novia, hermanas y mi infierno, nos dirigimos al hipódromo. Es ahí donde siempre hacemos nuestras carreras ilegales, el papá de Lezcano es dueño del lugar y él siempre hace de las suyas para que su padre no se entere, o bueno… realmente la mayoría de las veces lo hace pero todos terminamos por largarnos antes de que la policía nos capture.—No bebidas alcohólicas— les miro al acompañarlas al auto de Lean —no se van a separar, no quiero que lloren si mi auto se estrella con la barra de seguridad. No quiero ni una sola imprudencia. ¿Entendido?— les miro a las tres.—No ser un capullo…— se cruza de brazos Lean —no ser un estúpido, bruto y animal que no se da cuenta de las cosas— me mira a los ojos —digo, no se da cuenta que no somos unas niñas. Cuidaremos de Nasya, ahora lárgate con tu estúp
Los días pasan todo va de la mano, la felicidad y las frustraciones, la mentira y la verdad, el deseo y el odio. Entre más tiempo estoy con Lean, más difícil se me vuelve todo.Elena, Luz y otras mujeres que tenía en mi vida están reclamando su parte de atención y mi dulce infierno me advirtió que me dejaría sin bolas si no buscaba una solución para no tener que acostarme con Elena ni con ninguna otra.Pero no me quejo, jamás creí que follarme a una sola mujer podía ser tan excitante y placentero. Entre más la hago mía, más necesito de ella, más la deseo y más placer siento a la hora de poseerla. Mi Minion es adictiva y como un buen consumidor sé que esa mujer no me la borro de la mente nunca.Hemos actuado de manera inteligente, por supuesto yo sigo con Elene y ella dejó a ese estúpido que se creía su due&ntil
Al escuchar los pasos de Rucher las bolas se me suben a las costillas, no hay tiempo para que lleguen a la garganta. Lean se gira y me mira asustada, yo pienso rápidamente en que hacer, miro el piso y su golpe me hace mirarle.—Ni se te ocurra, no me voy a meter debajo de la cama ni en tu closet— susurra con advertencia.—Mamá no des un paso más— grito para que se detenga y me dé tiempo de pensar. Al mirar la cama desarreglada tomo la frazada y el montón de almohada y se la tiro encima cubriéndola completamente, queda como mi típica cama con la frazada enrollada y las almohadas dispersas, que bien ser desordenado —por Dios mamá— me giro con una almohada tapando me polla.—Hijo…—Me estaba masturbando— suelto interrumpiéndola, cierro los ojos con fuerza por mi estupidez, ¿Le he dicho a mi madre que me masturbaba?—
Después de hablar con mi dulce infierno, me dirijo a mi salón, como era de esperar perdí media clase y para que me dejaran dar el resto prometí ayudar con algunos proyectos. No sé cómo hacer para no dañar a Lean, sé que debo decirle la verdad, pero no lo haré, no la voy a perder por una estupidez, no la perderé y es todo.Después de la clase de sociología de la ciencia nos vamos al patio como siempre que tenemos un tiempo libre. No dejo de pensar en la falta que hice, no puedo creer que Lean esté tan dispuesta a estar conmigo, soy un maldito ser con tantos demonios que ya no sé ni por donde llegan.—¿Nos contarás que quería Luz?— pregunta Wendy—Pinga— carcajea Fran —¿Qué más va a querer esa mujer?—Por la cara que tiene el fulano al parecer no fue bien— miro a Roman y niego &
Infierno, si este maldito Capítulo de mi vida tuviera un título, sería ¡Infierno! Lean, mi dulce infierno está siendo mi amargo infierno. Ve a otros chicos, pasa de mí como si no existiera, me ignora de manera impresionante y cada vez que tiene la oportunidad me deja en claro lo bastardo que fui con ella, lo dolida que está por lo que hice esa noche.Yo no recordaba la estupidez que hice, pero claramente mis amigos me lo contaron todo, ¡me follé a Elena pensando en mi chica! soy una maldita basura que está decepcionada de si mismo. La mujer que estaba dispuesta a soportarme la ahuyenté con una sola estupidez lo que me hace cuestionar si realmente estaba dispuesta.Soy un desastre, soy todo lo que las mujeres evitan y lo tengo claro, pero creer que había una dispuesta a ayudarme, a enseñarme hacer las cosas bien me llenó de ilusión, pero tal parece que soy un cas
El tío se retuerce por el puñetazo en su abdomen, cuando voy a quitarme el pasamontaña Lezcano me detiene y niega, pienso las cosas y tiene razón, esta vez no podemos mostrarnos.Cuando Lezcano se pone en marcha y salimos del Coseway se dirige directamente a curundú, es el mejor lugar para dejarlo golpeado, solo espero que le roben el dinero y no la vida.—Por favor… por favor… déjenme ir— suplica llorando —yo no les he hecho nada, por favor…— sonrío burlón, ya se le olvidó Lean, ya no está preocupado por ella. Cabreado por lo cobarde que es le doy un puñetazo en la cara.—¿La amas?— pregunto con acento francés bastante marcado —¡Responde! ¿La amas?— el tío me mira incrédulo, ¿Es enserio? ¿No sabe de lo que hablo? —a tu novia imbécil, ¿La amas?&