Capítulo 23.

Thamara entró a la habitación como una fiera y quiso atacarme, Harold la detuvo y yo lo único que logré hacer fué cubrirme con la sabanita de la cama clínica ¿Qué le pasa? ¿Se volvió loca? Mi madre trato de calmarla y no lo logró.

— ¡No! ¡Esta mal por su culpa! Debió dejarla morir allí¡ Se lo merecía - mi cabeza comenzó a dar vueltas con flashes de lo ocurrido y casi revienta del dolor.

Comienzo a llorar, no puedo detenerme estoy que me desmayo y Thamara no deja de gritar, mi madre le dice cosas dulces para calmarla. Ella no cede chilla, grita patalea y llora pero ya no puedo entender lo que dice me duele demasiado la cabeza.

— ¡Thamara! ¡Cálmate por favor! - esa voz de trueno es la del abuelo. ¡Ay Dios! Esta enojado.

— ¡Abue! Yo, yo...

— ¡Lo sé mi ojos de gato! ¡Lo sé! Todos estamos preocupados, ahora necesito que te tranquilices ¿Si? - destapé mi cara y vi a mi abuelo abrazando a la Cuaima. Me hiz

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo