“Cada uno de mis francotiradores tiene al menos cien balas en sus armas de fuego. Si fueran a apretar el gatillo al mismo tiempo, ¿cuántos de ustedes creen que podrán sobrevivir?”.

La expresión de la multitud cambió frenéticamente después de escuchar esas palabras.

El Jefe Leonard Bray, que estaba sentado en la mesa principal, se puso de pie y exclamó con frialdad: “¡Deja de intentar presumir ya!”.

“¡Funcionarios del gobierno, personas de las principales familias y grandes personajes del inframundo están todos aquí hoy, Alec Cloude!”.

“¡¿Te atreverías a ofender a tanta gente al mismo tiempo?!”.

"¿La Pequeña Viviendo quiere morir o algo así?".

¡Bam!

Alec no perdió tiempo en hablar y agitó su mano derecha. Luego, un francotirador apuntó su arma de fuego directamente hacia el Jefe Leonard y apretó el gatillo sin dudarlo.

¡No!

El brazo izquierdo del Jefe Leonard fue perforado instantáneamente. Su rostro había perdido completamente el color mientras mostraba una expresión horrible.