CAPITULO 06

Llamada entrante de War.

Contestar Rechazar.

—Oye, ¿Te encuentras bien? — Mis lágrimas bajan por mis mejillas, él estaba de mi lado, otra vez.

—No... —

—Lo siento mucho, yo no hice nada para ayudarte… —

—No tuviste la culpa, fue mía, no fui capaz de defenderme… —

—¿Te dijo algo malo? — Solo recordarlo me hizo sentir mal nuevamente.

—Solo me trato mal, como si no hubiera sido mi amigo, pero sus palabras duelen, sabes. —

—y más cuando viene de alguien que importa —

—Si... —

—¿Dónde estás? — Él se escucha tan preocupado.

—En el baño...No tengo donde ir —

—¿Cual? —

—Tercer piso, En el edificio de Ingeniería, al lado del salón del profesor Samuel —

—Espérame, voy —

No respondí más, bajé mi celular y escondí mi cabeza entre mis piernas. Todo estaba tan genial una vez más en mi vida, ¿porque demonios tenía que aparecer él?

¿Por qué aún me dejo afectar por él? ¿Por qué lo permito?

La impotencia recorre mi cuerpo, no tengo ni fuerza, solo puedo llorar y seguir llorando.

[…]

Faltaba unas horas para salir de clases, aunque mi clase había tenido una hora libre ya que el profesor de matemáticas no pudo asistir. Me encontraba en la parte de atrás del colegio escuchando música con mis audífonos, estaba súper feliz. Ese día había sido tan diferente, me sentí tan libre al no sentir la necesidad de huir de mis propios miedos.

Pero como todo lo bueno no dura mucho, mi día feliz acabo en ese momento.

No me fije, pero mi ex grupo de amigos estaban frente a mí, con sonrisas burlonas. Me aferre a mis audífonos, no quería escuchar alguna palabra que salieran de sus bocas. Cuando ellos se fijaron que los estaba ignorando, se enfurecieron y me quitaron los audífonos.

No quería, solo quiero huir, no quiero estar acá, quiero estar debajo de mis cobijas en mi habitación.

—¿Te crees muy hombre por ignorarnos? —

Me quede callado, no quería responderles, sabía que cualquier cosa que ellos digieran me afectaría. Ellos también se molestarían si digiera algo, todo tan complejo.

—Eres un cobarde, se te comieron la lengua los ratones o te intimidamos —

Baje la cabeza, no debería haberlo hecho, pero no soportaba estar escuchando aquello, me hería y más si era Omar quien me hablaba.

Era el quien me decía todo, él lo sabía el daño que causaba, por eso no se detenía.

—Contesta, Hazlo, Cobarde —

Mis palabras parecían atascadas, un nudo en mi garganta se había formado y las ganas de llorar habían aumentado

—Vas a llorar, eres un muerde almohadas — Ellos reían y reían, yo solo quería hacerme pequeño en mi lugar, solo buscaba desaparecer.

Sus risas, su risa me hacía daño.

—¿Por qué? — Susurré lentamente aun con la cabeza baja, sin ser capaz de mirarlos directamente.

El miedo volvía a aparecer y no quería, odiaba todo en aquel momento.

—¿Porque qué? —

—¿Porque me molestas? — Lo dije queriendo que solo él me responda, solo quiero su respuesta.

A estas alturas de la vida, jamás lograre entender que les había hecho, jamás le di motivos para molestarme.

—Porque quiero — Sus manos tomaron mi rostro, obligándome a alzar la mirada, no quiero verlo — Porque eres un jodido marica, porque eres un asco como persona, ¿Gustar de una persona de tu mismo sexo?, que asco.

Mi mandíbula dolía, mis lágrimas bajaban por mis mejillas.

Ya no solo era dolor sentimental, ahora si me estaba lastimando físicamente.

—¡Omar!, Lo bajas ahora mismo —

Por su voz, supe que había sido Simón quien me había ayudado. Simón es un chico calmado, pero cuando se enoja es realmente intimidante.

—¡Ahora! —

Repitió, toda la vida Omar ha sentido respeto por Simón, y sé que no le gusta, es por eso que a regañadientes me bajo.

Simón me ayudo a levantarme, pero las lágrimas aumentaron y salí corriendo, en camino logré con encontrarme con aquel chico, el chico que no lograba encontrar.

El solo me miro triste, más lo ignoré y seguí, solo quería huir de ese lugar.

[…]

Unos suaves golpes se escuchan en el baño, no queriendo que alguien me descubra acá dentro, sigo encogiendo mis pies.

   ¿Dónde estás? — Esa dulce voz causo estragos en todo mi ser, sabía que jamás la había escuchado, de igual manera sabía que no era como tal su verdadera voz —Soy War.

   Ultimo cubico. — Susurro, a los segundos unos zapatos bien organizados.

A los segundos mire como un trozo de papel pasaba por debajo de la puerta, Aquello tal vez era lo único que necesitaba.

"Estaré aquí contigo, llora, no me retiraré hasta que sepa que estas bien. Cuando quieras salir solo golpea la puerta y yo me retiro, lo siento, no puedo dejar que aun sepas quien soy. No le creas lo que ellos dijeron, tu solo eres un chico hermoso, un chico que logro enamorarme a primera vista. ~War."

—Gracias, gracias por estar conmigo — Hable, sabiendo que él me escucha.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo